El que fuera líder del grupo Ketama puede presumir de haber abierto un nuevo camino de modernización del flamenco allá por los noventa, con el que abandonó de cierta forma su vertiente ortodoxa para mezclarlo con otros géneros musicales y ofrecer así canciones de un estilo fresco y creativo. Con dicha banda, Antonio Carmona recorrió Japón, llevando su particular versión del flamenco a un país desde siempre fascinado por los cajones y las guitarras españolas, y al inicio de siglo fue dos veces telonero de Frank Sinatra.
En 2021 el cantaor encuentra la paz personal y profesional subido a un escenario, reconectando y percibiendo el calor del público como único motor tras estos extraños meses de pandemia, en una nueva gira de conciertos que comenzó en el Teatro Real de Madrid. Una gira enmarcada en un momento social y cultural en el que la industria de la música ha tenido que reinventarse por completo para llegar a nuevas y más amplias audiencias. Aunque ciertas cosas nunca cambian, como “la emoción de subirse a un escenario para experimentar la magia que solo él puede ofrecer”, explica el artista.
Dispuesto a innovar, consciente de la necesidad de una mente abierta para que el flamenco evolucione, Antonio Carmona integra en un nuevo concepto musical a las generaciones más recientes de “los Habichuela” -llamadas así a los descendientes del Habichuela Viejo, tatarabuelo de Antonio Carmona y nacido a finales del siglo XIX-, donde todos se sientan en torno a una mesa de percusión y cada uno, ya sea cantando o con instrumentos, exhibe su propia forma de entender la música. Así, la mezcla del flamenco tradicional con la esencia transgresora de los más jóvenes del clan permite acercar este género a todos los oídos ansiosos de nuevas fusiones artísticas, desde el jazz hasta el rock o el reguetón. Entre los artistas emergentes escoge a Israel Fernández o Kiki Morente y reconoce que Madrid es una ciudad necesaria -casi obligada- para crecer en este género, para absorber todo tipo de conocimientos y crear piezas musicales que aúnen el toque flamenco y la cultura contemporánea.
La carretera como aliada
Acostumbrado a realizar largas giras que lo llevan de punta a punta por la geografía española, el artista valora del nuevo SUV Citroën C5 Aircross Hybrid la comodidad y facilidad de conducción, convirtiéndolo en la mejor opción para emprender cualquier aventura urbana. Su hija Marina lleva acompañándolo en sus giras cinco años y ahora se embarca también en esta especial colaboración, compaginándola con su reciente aterrizaje de los premios MTV celebrados en México -donde compartió experiencias con músicos como C. Tangana- y con la grabación de su próximo disco. Así, el nuevo modelo de Citroën es el coche perfecto para la vida moderna, para los viajes de verano y para contribuir a la protección del medio ambiente. Además, la comodidad de su amplio maletero permite que una vida nómada como la del cantautor cuente con el espacio necesario para, por ejemplo, sus instrumentos, entre ellos guitarras, baterías y percusiones. “Los atascos son grandes momentos de inspiración para nosotros, por eso creo que es tan importante contar con un buen equipo a bordo. La M-30 ha sido testigo de algunos de mis grandes éxitos ”, cuenta entre risas.
En busca de un futuro sostenible
Primer modelo híbrido enchufable de la marca, el SUV Citroën C5 Aircross Hybrid es el modelo inicial en su gama de vehículos de bajas emisiones, que tiene una previsión de ser 100% eléctrica en 2025. Versatilidad y autonomía unidas a un motor de combustión interna para trayectos de mayor duración lo convierten en un referente de confort, gracias a ventajas como su motor eléctrico, la conducción silenciosa, la potencia instantánea y emisiones CO2 entre 32 y 33 gr.
La batería se carga en una noche (entre 4h y 7h según el tipo de toma empleada) y en un punto de carga 32A se completa en menos de dos horas. La carga se puede programar y diferir con el objetivo de beneficiarse de la mejor tarifa eléctrica, programándola desde la pantalla táctil del vehículo o desde la aplicación MyCitroën en el smartphone. La trampilla de carga cuenta con un indicador LED para seguir el proceso de carga visualmente: una luz blanca que indica el modo Bienvenida, un luz verde que parpadea que indica que la carga está en proceso, una luz azul que indica carga diferida, y una luz verde que indica que la carga se ha completado. Su interior ofrece asientos grandes y acogedores gracias a la mezcla de una espuma de alta densidad y otra de textura suave.