Varias tendencias coinciden en el maquillaje de otoño-invierno. Repasamos con los make up artists de MAC Cosmetics Mayte Tuset y Baltasar González todo lo que se lleva y cómo llevarlo, recordando los looks de pasarela de Nueva York para las colecciones de la temporada que empieza. ¡Coge las brochas!
Entre gótico y punk
Es la más extrema de las tendencias del otoño-invierno. Al hilo de las colecciones de pasarela que han coqueteado con el oscurantismo estilístico de la época victoriana, el maquillaje es una mezcla de la elegancia clásica de la antigua nobleza de salones con tapices, pero modernizada con un toque gótico y hasta un punto punk. Así se vio en los labios negros de Giles, en el exagerado eyeliner negro casi como una pieza bajo los ojos en Rick Owens o en el eye-liner clásico pero extremo en Oscar de la Renta.
Un consejo: Si te apuntas al nuevo look no mezcles churras con merinas, elige entre labios u ojos oscuros, pero no las dos cosas, por favor, o solo triunfarás en la noche de Halloween.
Para los labios de rojo oscuro, que puedes llevar más allá mezclando con pigmento negro, los expertos de MAC Cosmetics recomiendan utilizar una brocha grande pero plana, para conseguir un mejor efecto.
Naturalmente romántica
Quizá la tendencia más fácil de llevar por la mujer de la calle. El secreto está en la piel, que ha de lucir perfecta, muy matizada, ni mate ni brillante, con una paleta cromática cálida como en Chloè y Alexis Mabille, al hilo de la corriente make up like no make up que ya triunfó la temporada pasada y que fue la protagonista del desfile de J.W.Anderson.
Hay una cierta tendencia al hiperrealismo y al resultado romántico. Incluso en Max Mara, con su aproximación a una Marilyn Monroe moderna, hay un acabado sensual, elegante y sin estridencias.
Bronceado de invierno
El nuevo bronceado viene muy fuerte, aunque no sea lo más común para el otoño-invierno. En DSquared2 o Moschino hay hasta bronceado en chicas muy pálidas, y con acabado rojizo. ¿Cómo hacerlo? Inspírate en el moreno marbellí de los 80 y la época de Kashogui, pero más sutil y sin ordinarieces. “No es un bronceado totalmente tostado, sino suave, afilando un poco la forma del rostro sin llegar al contouring. Se perfila el óvalo del rostro y se aplica colorete rosado de manera natural, para no caer en el efecto muñeca”, precisa Baltasar García.
Desgastado
Cuidado con esta tendencia porque no es fácil de llevar y seguramente esté más indicada cuantos menos años tenga quien la lleva. Aunque se sigue apostando por los ahumados en ojos, el acabado es nuevo y ha de ser descuidado, como si estuviera desgastado, como si hubieras salido de casa perfecta pero tras horas de estar de copas solo quedaran los restos, algo emborronados. Esto “imprime al maquillaje cierta modernidad”, opinan los make up artist de MAC. Inspírate en los looks de Ann Demeulemeester y Roberto Cavalli.
Consejo: Apúntate solo si te manejas muy bien en esto del maquillaje.
Rojo ‘seventies’
La paleta de rojos abandona los looks clásicos para volverse un poco más rebelde, y se mezcla con los tonos que recuerdan a los de los licores, los ocres, los naranjas y los calderos, que maquillan una boca que convive con una piel casi cruda y desnuda. “No es un rojo rubí ni glamour de Hollywood”, advierte Mayte Tuset.
Dos tendencias conviven: La de los labios muy definidos con otros desdibujados, como en Emilio Pucci, siguiendo la misma tendencia de “efecto desgastado”. Esto se consigue con un labial difuminado.
Consejo: Con mucho cuidado, al terminar de maquillarte, ayúdate de un bastoncillo de ls oídos para desdibujar el contorno del labio. El acabado tiene que ser elegante.