Se acerca el verano y toca echar un vistazo a lo que está por llegar, sobre todo para chicos. La tendencia elegante es llevar camisas de manga larga, remangadas eso sí, y con un par de botones desabrochados. Ese te enseño, pero no se ve, nos fascina. Hasta estaríamos dispuestas a trucos zafios, como tirar nuestros pen drives al suelo, solo por ver cómo os agacháis y enseñáis lo que… no se va a ver. ¡Justo! ¡Esa es la intención!
Y es que la cosa va de escotes: si el tuyo es más pronunciado que el de tu chica, vas mal. No podéis competir con nosotras también en esta faceta. Lo sentimos, pero para pechos, los nuestros. ¿Os imagináis un verano sin nuestros canalillos? Sabéis perfectamente que sería algo deprimente y sin alegría. Aclarémonos: nos encanta ver pectorales,¡claro!, pero bien desarrollados y en su justa medida y, siempre, perfectamente depilados. Si no estás dispuesto a quemarte en el gimnasio y a repasarte diariamente con las pinzas de depilar, olvídalo. Deja que el escote lo luzcamos nosotras. Somos muchas las que guardamos en la retina la depilación del pecho peludo de Steve Carrell en Virgen a los 40 y, creednos, sabemos que sois incapaces de sufrir así repetidas veces. Steve se dejó medio pectoral sin depilar… y ligó con una freak. Si buscas otro perfil de chica, ponte en nuestras manos. Te lo aseguramos, los escotes con alfombrilla no son bienvenidos.
La otra tendencia clarísima de este verano son el animal print y el camuflaje reinventado. Tener en el armario una camisa, una, y en tonos más bien arenas para no ser el rey de la selva que llega rugiendo a la oficina, es casi una obligación y un básico. Pero nosotras os aconsejamos detalles: cinturón, corbata o unas zapatillas de skate de camuflaje como acompañamiento a la camisa blanca y al pantalón arena: seréis los absolut kings. Nosotras tenemos asegurado el triunfo: ¡los pectorales nos crecen sin ir al gimnasio (aunque a muchas les crezcan en el quirófano) y siempre vamos depiladas! Otra cosa será la sorpresa que aguarde tras la puerta y a solas… ese boxer de camuflaje adaptándose a nuevas formas puede resultar muy tentador. ¡Chicos, toca ir de tiendas!