Entre actrices descalzas, escotazos y demás ostentosidades, el Festival de Cannes no está pasando desapercibido para nadie. En esta ocasión, las cámaras se han centrado en la modelo Kate Moss que acudió al estreno de la película Loving con un atrevido traje rojo de la firma Halston con una interminable raja lateral que tuvo preocupada a Kate toda la celebración, puesto que tenía que controlar constantemente que no se abriera en exceso y dejara a la vista de todos más de lo que ella quería enseñar. El escote asimétrico de su vestido le permitió poder lucir pendientes de la marca de joyas Chopard y unas sandalias negras de Maison Ernest.
Por el contrario, Kirsten Dunst, miembro del jurado de este 2016, decidió mimar con detalle el vestido para esta presentación y realizar su aparición al más estilo princesa de cuento, con un look elegante y dulce. El vestido elegido para la ocasión es un vestido largo de Dior en blanco elaborado por la firma para ella en exclusiva. Los ramilletes florales que cuelgan por el vestido le daban un aspecto muy angelical, rompiendo con los osados looks del resto de los asistentes al festival.
Otras celebrities que no han dejado indiferentes a nadie con sus looks extravagantes han sido por ejemplo, la modelo alemana Toni Garrn con un diseño de Ulyana Sergeenko que no siguió la norma no escrita de la moda de “si enseñas por abajo, no enseñas por arriba o viceversa” y decidió ponerse un escote palabra de honor y una enorme raja en la falda del vestido.
Paris Hilton, como nos tiene acostumbrados, también decidió no pasar desapercibida en la fiesta que Chopard hizo en el festival y se puso un ajustado vestido de color blanco con llamativas transparencias. La sorpresa de la noche, en esta misma fiesta fue Marion Cotillard, quien decidió vestir del diseñador español Delpozo con un original look (casual e informal para lo que estamos acostumbrados a ver en este tipo de eventos), basado en un conjunto de pantalones tipo leggins de lúrex color marsala con un top con cuello asimétrico en lila.