El paleoantropólogo Juan Luis Arsuaga comentó hace mucho tiempo a la fotógrafa Isabel Muñoz que lo primero que el ser humano adoró fue la naturaleza, las piedras, los árboles, el agua… Desde entonces, rendir homenaje a la vida y a su origen forma parte de la obra de la artista, que presenta ahora una nueva intervención artística para El Corte Inglés llamada Antes del tiempo. Se trata de un proyecto centrado en el primer templo de la humanidad, situado en las colinas de Göbekli Tepe, en Turquía. Las imágenes se expondrán en las sedes de Preciados y Callao son piezas creadas especialmente para para estos escaparates, “donde va a estar presente la tierra turca, el ADN de esas personas”, y donde la fotógrafa ha plasmado una nueva forma de narrar la historia. Todas estas imágenes están realizadas de noche, “con la misma iluminación que usaban ellos, con esas antorchas que desvelan muchas de las cosas y muchos de los enigmas que nos han querido dejar”, indica.
Muñoz visitó el yacimiento de noche, a la luz de la luna y las estrellas, sin utilizar luces artificiales y descubrió por ejemplo, que tenían conocimiento no sólo de las estrellas, también de las constelaciones, de la utilización de la luz y de las sombras. Según como colocabas la luz en un sitio u otro, ese animal antropomorfo, tótem, llámalo como quieras, de repente te sonreía o de repente se volvía fiero”, detalla.
También descubrió también cómo se creaban las relaciones humanas. «He visto muchas representaciones de masculinidad y feminidad. Poniéndonos en su piel, te das cuenta de cuál sería para ellos el principio de todo. Realmente en muchas de las piezas se puede apreciar por un lado ese principio de la masculinidad y también el principio de la feminidad, porque realmente en esa época lo más importante era la procreación”, reflexiona.
Los escaparates reunirán distintos tótems que estarán retroiluminados y esas imágenes estarán alojadas en una caja del tiempo donde habrá tierra que contenga el ADN de las personas de las que habla la muestra. De la misma forma que representó el aspecto espiritual del yacimiento, también quiso hablar de los orígenes de la fotografía, que comenzó imprimiéndose sobre cristal. Por ello algunas de las imágenes se han trabajado sobre metales preciosos y están impresas sobre cristal.