Entre los estrenos más esperados del mes de junio en las plataformas en streaming figura, además de The Acolyte, la segunda temporada de La casa del dragón. Será el día 17 cuando por fin se puedan empezar a ver en Max los nuevos episodios de este fenómeno creado a partir del éxito de Juego de tronos en los que Matt Smith es uno de los protagonistas.
Este actor de 41 años nacido en Northampton no es un rostro nuevo para los seriéfilos. Le conocimos en el 2010 en Doctor who, la ficción más longeva porque acaba de cumplir 60 años desde su primera emisión; y después conquistó al gran público gracias a su interpretación de Felipe de Edimburgo en The Crown. Pero ha sido su papel en la serie que narra la guerra civil surgida dentro del clan Targaryen la que le ha puesto de nuevo sobre la pista.
Ha sido precisamente durante el estreno de La casa del dragón que se ha celebrado en Nueva York donde Matt Smith ha vuelto a dejar claro no solo que es uno de los intérpretes del momento, sino que su armario es uno de los armarios más interesantes del panorama actual.
No hay alfombra roja o premiére en la que el actor pase desapercibido. Lo suyo no son los looks convencionales a base de elementos excesivamente sobrios o anodinos. Tampoco las prendas excesivas que se llenan de colorido y ornamentación. Su apuesta simplemente es por piezas aparentemente clásicas pero que ofrecen algo diferente a lo que proponen las tendencias, algo que siempre es de agradecer para quienes disfrutan del juego de la moda.
En el evento celebrado en la gran manzana, por ejemplo, el encargado de dar vida a Daemon Targaryen optó por llevar traje, camisa y corbata, algo que podría resultar clásico pero que, a la vista está, no lo es en absoluto.
Lejos de optar por un diseño de sastrería tradicional, el traje de Matt Smith en la presentación de The House of the dragon era de silueta fluida y estaba compuesto por un pantalón ancho con fajín y una blazer de esmoquin con solapas redondeadas. Dos piezas que ya de por si resultaban sorprendentes y que acompañó de una camisa azul cielo sobre la que colocó una corbata con nudo muy estrecho en color blanco.
El resultado fue un look formal con un punto de descaro y relax que quedaba enfatizado gracias a haber peinado su cabello sin ninguna tensión con raya a un lado. Una estética propia de la que ya ha hecho gala Matt Smith en anteriores ocasiones y que le confirman como una de las estrellas a las que conviene seguir la pista en materia de estilo.