¿Vitaminas inyectables en la piel? Estos son sus mandamientos

¿Vitaminas inyectables en la piel? Estos son sus mandamientos

¿Vitaminas inyectables en la piel? Estos son sus mandamientos

Duele un poquito, si, pero los resultados son tan buenos que merece la pena. Eugenia Silva, María León o Vicky Martín Berrocal lo confiesan sin problema. Ahora, las maestras y maestros de las infiltraciones no utilizan jeringuillas, sino una especie de pistola futurista, tipo Guerra de las Galaxias, que minimiza el dolor de los pinchacitos. La pistola ayuda para que duela menos y para que la rapidez a la hora de pinchar se multiplique por diez.

Todavía hay consultas que los realizan con la jeringuilla en mano, pero resultan muy dolorosas. La aguja no es lo suficientemente fina y como cada pinchazo amarga más que la cicuta, estás deseando que terminen y apenas toleras más de 10. Con la pistola, sin embargo, toleras la cantidad de vitaminas que hayas pagado y te quedas con ganas de más.

La misión de estos inyectables es, sobre todo, recuperar la luz y la jugosidad de la piel. Protegen las células dérmicas y mantienen su buen funcionamiento. Lo principal que tenemos que entender es que es necesario  alimentar a la piel,  es decir, tenemos que aportarle los nutrientes necesarios y recuperar la correcta tasa de hidratación.

Para abrir boca, os iniciamos con las vitaminas, pero este campo es vastísimo. Los efectos suelen durar 3 meses y el precio varía entre los 150 y los 350 euros. Justo antes del verano no es aconsejable aplicarlas porque, a veces, pueden aparecer pequeños hematomas que impiden tomar el sol porque se pigmentan y dejan marca. Lo mejor es aplicarlas durante el mes de mayo –aunque con el mal tiempo que está haciendo quizás todavía lleguéis a tiempo– y luego repetir en octubre.

Las vitaminas en la piel sirven, en general, para estimular y mantener el metabolismo celular, y aportan diferentes beneficios. Os resumimos las más empleadas en el protocolo de la mesoterapia facial. Este es el cóctel sublime:

1. Vitamina B1 o Tiamina: actúa en el metabolismo de azúcares y oxígeno para obtener energía .

2. Vitamina B2 o Riboflavina: favorece la absorción de nutrientes y su transformación en energía. Es esencial para mantener la integridad de piel y mucosas.

3. Vitamina B3, Vitamina P o Niacina: regula el metabolismo de grasas, hidratos de carbono y proteínas.

4. Vitamina B5 o Ácido Pantoténico: fundamental para formar Acetyl CoA, la molécula esencial para la respiración celular.

5. Vitamina B6 o Piridoxina: estimula el crecimiento, conservación y reproducción celular.

6. Vitamina B8, Vitamina H o Biotina: actúa facilitando los procesos de duplicación celular.

7. Vitamina B9 o Ácido Fólico: indispensable para la regeneración celular. Es esencial para la formación y mantenimiento de nuevas células.

8.  Vitamina B12 o Cianocobalamina: necesaria para la formación de ADN y la duplicación celular.

9.  Vitamina A o Retinol: es vital para mantener sanos huesos y tejidos blandos (piel y mucosas). Su precursor, el Betacaroteno es un potente antioxidante.

10.  Vitamina C o Ácido Ascórbico: evita el envejecimiento prematuro, facilita la absorción de otras vitaminas y minerales, es un potente antioxidante. Es esencial para la correcta formación del colágeno.

11. Vitamina D: regula el metabolismo del calcio y del fósforo. También tiene funciones de antienvejecimiento celular y de modulación del sistema inmune.

12.  Vitamina E: es la que contiene el efecto antioxidante más potente.

Si queréis un soplo, a nosotras nos encanta Amaya San Gil, somos asiduas desde hace años. Todo su equipo es de una eficacia absoluta y en sus manos, nosotras lucimos como nadie.

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