Como si de una premonición se tratase, el mismo año que nació Carlos Rodríguez, 1986, su padre fundó Sierra Blanca Estates, una de las principales promotoras inmobiliarias de lujo de la Costa del Sol. Aunque se siente marbellí por los cuatro costados, nació en Nueva York, estudió en la Londres International Business y volvió a Estados Unidos para trabajar en una entidad financiera en 2008, mientras crecían sus deseos de volver a su lugar de origen. “Tuve la suerte de vivir un acontecimiento histórico, como fue la caída de Lehman Brothers, por lo que aprendí un montón. Pero, por otro lado, en España fue la gran crisis inmobiliaria, por lo que pensé que quizá era el momento de integrarse en la empresa familiar, aunque por aquel entonces no lo tuviera muy claro”, explica a GENTLEMAN sobre aquellos años.
Fueron sus ansias de seguir aprendiendo y no acomodarse en la figura del hijo del fundador lo que le llevó a empezar desde abajo: “con humildad y respeto y aportando todo mi conocimiento. Al poco tiempo me di cuenta de que me gustaba estar ahí y que podría aportar mi valor profesional al rumbo marcado por mi padre, acompañado también por mi hermano, Luis, en esta nueva etapa”, reconoce Carlos Rodríguez, desde hace más de diez años CEO de Sierra Blanca Estates.
Octubre de 2015 es una fecha que está grabada a fuego en la trayectoria de la promotora marbellí. “Fue el año en el que se canceló el Plan General de Marbella, lo que significaba que todo lo que teníamos concebido sobre unos suelos iba directamente a la basura. Había que empezar de cero, teníamos que reinventarnos, crear algo distinto y generar una demanda que hasta entonces no existía. La dificultad hizo que nos exprimiéramos al máximo y lo que nos llevó, entre otras cosas, a meternos en el mundo del branding”, comenta el empresario.
Una de las primeras cosas que hicieron fue trasladar la milla de oro marbellí hacia la montaña, creando sofisticados apartamentos de hasta 1.000 metros cuadrados. Se trataba de EPIC Marbella, que ya en la segunda fase tomaría el apellido furnished by Fendi Casa, y se convirtió en la primera promoción de luxury branded residences en Europa. “Nos inspiramos en sitios donde se están haciendo cosas diferentes. Y mi hermano, que por aquel entonces estaba en Florida, nos contó que allí estaban haciendo alianzas entre marcas de moda e inmobiliarias, de manera que la gente percibía las casas de una manera totalmente diferente a la nuestra, como si se tratara de un objeto de deseo y por el que eran capaces de pagar precios desorbitados. Nos dimos cuenta de que en Marbella teníamos un mercado más fuerte que el de Miami y que contábamos con la materia prima –explica Rodriguez–. Al final, la esencia de un promotor es crear algo que genere un interés a nivel internacional. Y eso fue lo que nos permitió el branding”.
Después del éxito de aquella promoción, Sierra Blanca Estates acaba de presentar KARL LAGERFELD Villas Marbella: cinco exclusivas villas que vienen bajo la estela del kaiser de la moda y de las que, a pesar de que las obras se acaban de iniciar y la entrega de llaves está prevista para 2024, ya se ha vendido una por un valor que ha rondado los 15 millones de euros. “El precio no es condicionante en este tipo de viviendas. Al final estás ofreciendo al comprador una experiencia que no haya vivido antes: no se trata de hacer una casa con un logo, se trata de impregnar cada vivienda de la filosofía de Lagerfeld, como si fuera su casa”, añade.
Las cinco viviendas, todas diferentes, se levantarán sobre una parcela de más de 9.000 m2 con estanques y caminos peatonales. Dotadas de jardín privado y piscina, las casas se distribuyen en cuatro plantas comunicadas por ascensor y cuentan con entre cinco o seis dormitorios, cine, aparcamiento, solárium, spa y unos grandes ventanales de suelo a techo en la planta baja.
En cuanto a la pregunta de si son ellos los que se acercan a la marca de moda o viceversa, el CEO de Sierra Blanca lo tiene claro: “Haber sido la primera promotora que apuesta por esta unión fue la gran prueba. Una vez que te has establecido como el promotor de las marcas de moda, ya casi son ellas las que te buscan a ti. Sí, hay muchas más promotoras, pero para nosotros el lujo va mucho más allá de calidad, sofisticación, diseño: el lujo comienza desde que el cliente atraviesa nuestra puerta”, concluye Carlos Rodríguez.