Sus orígenes más que saneados
Yves Saint Laurent nació en Orán, cuando Argelia era una colonia francesa. Su padre era descendiente de un barón francés y presidente de una compañía de seguros, además poseía varias salas de cine. Karl Lagerfeld nació en Alemania en el seno de una familia de banqueros suecos a los que les dio por introducir la leche en polvo en Alemania.
Su pasión por el arte
Saint Lauren, que falleció en el 2008, dejó a su compañero de toda la vida Pierre Bergé (se separaron en el 92 y siguieron viviendo juntos como amigos hasta el final), la colección de arte que consiguieron gracias, en mucha parte, a las ventas de su famoso perfume Opium. Desde Goya hasta Frans Hals, Munch, Matisse, Mondrian, Toulouse-Lautrec, Cézanne…
Lagerfeld lleva el arte dentro y lo expone al resto de la humanidad a través de la fotografía. Ha recibido el prestigioso premio de la Asociación Alemana de Fotografía y ha realizado las fotos para el calendario Pirelli -el más famoso del mundo- de 2011 (introduciendo, por primera vez, desnudos masculinos).
Su amor por el mismo hombre
Al menos eso cuenta la leyenda. De tener una estupenda amistad entre colegas (a pesar de que en el primer concurso de la casa Balmain al que se presentaron, Karl consiguió el primer premio y un puesto de trabajo e Yves no) pasaron a tener una excelente enemistad entre divas.
Su pasión por el vaquero
Karl adelgazó 36 kilos en 13 meses sólo para enfundarse unos slim de su adorado Slimane. Yves siempre lamentó no haber inventado el vaquero, en sus palabras fue lo “único” que lamentó.
Su adicción a la Coca-cola
Yves dejó la cocaína y el alcohol y se pasó a la Coca-cola, de la que dicen era capaz de beber más de dos litros diarios. Karl la descubrió en su ataque anoréxico y desde entonces no bebe otra cosa, pero en light.
Su belleza juvenil
Yves y su famoso desnudo a lo Jim Morrison… Y Karl y su súper estilazo latino a lo Chayanne… ¡Qué crueldad el tiempo!
Sus frases lapidarias
Pero… ¿Cuál es de quién?
«Para ser hermosa, lo que una mujer necesita es un suéter negro, una falda negra y caminar del brazo de un hombre que ame». (YSL)
«Piensa en rosa pero nunca lo lleves puesto». (KL)
«La elegancia es olvidar lo que uno lleva puesto». (YSL)
«Todo lo que digo es una broma. Yo mismo lo soy». (KL)
«Detrás de mi no vendrá nadie que merezca la pena. No veo ni un sólo talento». (YSL)
«No sé qué edad tengo. ¿Cómo voy a recordar cuándo me parió mi madre?» (KL)
Sin embargo, y aunque coinciden hasta en las citas («En moda el estilo es eterno» o «Lo único que permanece en moda es el estilo») hay dos diferencias esenciales: Yves fue un espíritu frágil y autodestructivo y Karl… Karl es una máquina de trabajar. Alemán frente a francés, al fin y al cabo.