Cinco propuestas para comer fetén en carretera

Cinco propuestas para comer fetén en carretera

Cinco propuestas para comer fetén en carretera

Área 103 o Venta de AlmadronesA-2, km 103 (Almadrones, Guadalajara) T. 949 285 511

Si en el camino ves un restaurante rodeado de camiones, aparca porque fijo comes bien. Los que le tengan fe a esta máxima habrán de hacer un alto en el mítico 103, parada y fonda obligada de los amos de la carretera. En realidad son dos ventas, una antigua y otra más reciente a cada lado de la autovía, con todo tipo de servicios a mano: desde gasolinera, taller y hotel hasta un anticuario. Entre sus especialidades, los torreznos, las carnes que salen todo el día de su asador de leña, platos de cuchara o raciones que van de la perdiz en escabeche al bacalao al pil-pil. Imprescindible su alioli como dios manda, sus desayunos de pan con tomate y jamón o unos sustanciosos bocatas, entre los que reinan el de chorizo a la brasa y el de butifarra, que dejan a la altura del betún a los bocadillos plastificados de las cadenas de franquicia. Su tienda está bien surtida de embutidos de nivel, patés, conservas, vinos, dulces y aceites.

Lagar de Milagroswww.lagardemilagros.comA-1, salida 146 (Milagros, Burgos) T. 947 548 091

Al pie de la autovía, este restaurante a diez kilómetros Aranda de Duero presume de un lechazo asado en horno de leña que nada tiene que envidiar al de sus vecinos, con la ventaja que de aquí no hay problemas para aparcar. Otras especialidades, sus escabechados caseros de pichón, perdiz, codorniz o pollo tomatero, su pollo de corral guisado a la cazuela o su bacalao estilo lagar. Si el tiempo no diera para tanto homenaje habrá que dirigirse a la barra, donde despachan una tortilla rellena que revive a los muertos, delicatessen de matanza por raciones o bocadillos para las prisas, que aquí preparan con pan de torta típica de Aranda y aceite. Los que prefieran tener a mano todo tipo de servicios, muy cerca el área de Tudanca, una de las mejores y más completas de España, reúne asador, cafetería, tiendas, hoteles o áreas de picnic, de juegos para los niños y hasta de descanso para las mascotas.

El MarinoCarretera Madrid-Valencia, km 167 (Honrubia, Cuenca) T. 96 929 20 23.

En la salida 168 de la A-3 el “nuevo” Hotel-Restaurante Marino, abierto al poco de inaugurarse la Autovía de Levante, no sólo tiene alrededor lo habitual en una estación de servicio –gasolinera, parking enorme o tienda donde comprar Miguelitos de La Roda– sino que, además, ofrece unos bocadillos espectaculares y una parrilla de leña funcionando todo el día de la que salen unas carnes que no le van a la zaga. Todo a lo grande, eso sí, porque tiene mucha tralla. Si se busca algo más personal, a sólo 400 metros, en la antigua nacional Madrid-Valencia, el viejo Marino sigue abriendo las 24 horas, como desde 1959, y aquí sí que absolutamente todo es casero: desde la tortilla hasta especialidades como el pisto manchego, el morteruelo, las alubias estofadas o las chuletillas de cordero. A cada cuál de elegir su Marino favorito.

La Haciendawww.lahacienda303.comA-6, salida 303 (La Bañeza, León) T. 987 65 62 50

Un gran parking vigilado por cámaras, hotel y gasolinera al lado, así como la ventaja de que la cocina esté abierta día y noche, ofician como buenos valedores de este complejo con también cafetería y restaurante en el que, a pesar de su tamaño, se apuesta por la cocina casera y las buenas materias primas de la zona. Entre lo mejor, sus ancas de rana, sus alubias de La Bañeza o su cecina, aliñada si se prefiere con foie, amén de sus 1.600 referencias de vino y su tienda, donde todo lo que se come en la casa se encuentra también a la venta. Si se prefiere algo más íntimo, el restaurante de la gasolinera de Puerto Manzanal, en el kilómetro 345, es de esos que le dejan a uno el puchero en la mesa por si quiere repetir.

Casa PepeA-4 salidas 243/244 (Venta de Cárdenas, Despeñaperros) T. 926 33 90 56

La fachada rojigualda del mesón sirve de aviso para navegantes. Una vez adentro, entre botellas de vino con la foto del caudillo, banderas y latas de aceite con el águila o navajas con un “Arriba España” en el filo, lo cierto es que en este clásico de las estribaciones de Despeñaperros se tapea muy bien: ibéricos, buenos quesos y mejores platos de caza, sus míticos bocadillos de lomo de orza… Personalidad desde luego no le falta. Además serán dos viajes –uno de ellos al pasado– al precio de uno. Si aún así uno prefiere abstenerse, muy cerca, en la salida 262 a la altura de Santa Elena, el área de servicios Abades Puerta de Andalucía se erige como una propuesta radicalmente opuesta y de diseño. Además de lo típico –gasolinera, zonas verdes, parking o varios lugares para comer– por tener hasta tiene parafarmacia, oficina de turismo, tienda especializada en aceite y derivados de él como el jabón, e incluso un pequeño museo consagrado a su elaboración.

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