El concepto es difícil de explicar, pero fácil de entender. Los expertos dicen que por su forma abombada, y la altura de sus paredes, los alimentos mantienen mejor su sabor y su textura. Su uso tiene algunas reglas de obligado cumplimiento. Por supuesto, siempre con poco aceite. Por supuesto, muy caliente y mientras se saltea, debe estar siempre en movimiento. Como cualquier artilugio de cocina, tiene un mínimo mantenimiento para evitar que se oxide y además se debe limpiar a mano y con agua templada.
En las cocinas modernas el problema es su tamaño. Un wok se parece mucho a ese familiar que molesta en todas las reuniones. Nunca encuentra su sitio en el armario. Menos mal que gracias a la compañía Leopold Vienna, podemos encontrar accesorios que pueden aumentar la funcionalidad de esta “maquina”. El Grill Wok es sumamente útil porque se adapta a cualquier tipo de grill y puede lavarse en el lavavajillas. Es un buen capricho por 22 euros. Se encuentra en la página del fabricante. Para comprarlo siempre podemos pasar por la maravillosa tienda de Claudia & Julia.