En el nombre de Omega

En el nombre de Omega

En el nombre de Omega

Hace 125 años, el nombre de Omega pasaba a designar a la compañía que había sido fundada en 1848 por Louis Brandt. En origen, se trataba solo de un pequeño taller en radicado en La Chaux-de-Fonds (ahora su sede se halla en Bienne). Con el nombre Omega, también aparecieron en escena elementos que ratificaban el espíritu del fundador, especialmente en la precisión, pero también introducía, con el calibre 19 líneas, la idea de la producción en serie con el empleo de nuevos métodos de trabajo. Entre los productos que celebran este aniversario se encuentra un nuevo De Ville que incluye algunos detalles únicos y un nuevo movimiento de cuerda manual.

El De Ville Trésor cuenta con una caja de 40 mm y una esfera esmaltada en rojo como aparece en el logotipo de la compañía y combina maravillosamente con la pulsera de piel en color burdeos. Es la primera vez que la compañía ha creado un reloj con la esfera decorada en ese color. A eso hay que añadirle unos índices abovedados y las elegantes agujas, para los que se ha utilizado oro. Un reloj de extraordinaria belleza que se manifiesta también en el fondo de la caja. Aquí, Omega ha remarcado el aniversario de su nombre con un medallón especial en oro amarillo y esmalte rojo, que a su vez está rodeado por un grabado damasquinado. Este mismo motivo geométrico se utilizó originalmente para adornar algunos de los movimientos Omega 19 líneas, muy populares en EEUU.
En lo que respecta a la parte mecánica, este De Ville Trésor luce en su interior el calibre Omega Master Chronometer 8929, un particular homenaje al calibre de 19 líneas y convertido en el primero con el calificativo Master Chronometer de carga manual. Un nuevo ejercicio en la historia de una marca que siempre ha dejado claro que la innovación está íntimamente ligada a su evolución. Y por supuesto desde que se llama Omega.

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