IWC Schaffhausen vuelve a sumarse un año más al Solidarity Xmas Tree, el proyecto solidario que reúne a destacadas firmas de lujo para crear árboles de Navidad exclusivos que se exponen en sus boutiques y se subastan posteriormente en una gala benéfica en el Teatro Real de Madrid. En esta edición, la marca suiza ha contado con la colaboración del diseñador español Álvaro Catalán de Ocón, reconocido por integrar artesanía, sostenibilidad y diseño contemporáneo en todas sus obras.
El creador, impulsor de la iniciativa PET Lamp —que desde 2011 transforma residuos plásticos en piezas decorativas elaboradas por comunidades artesanas— ha desarrollado un árbol solidario que mantiene su enfoque en la reutilización, la técnica manual y el impacto social. “Un año más, es un placer para nosotros colaborar en esta iniciativa solidaria, presentar en nuestra boutique una creación que celebra la artesanía y el compromiso con la sostenibilidad, y apoyar a las fundaciones elegidas”, señaló Carlota Segala, de IWC Schaffhausen.
Por su parte, Álvaro Catalán de Ocón destacó la dimensión social del proyecto: “Es un orgullo participar en esta iniciativa de la mano de IWC y poder traer a Madrid el excepcional trabajo de las tejedoras de Ruanda, capaces de transformar el bambú y el papiro en formas poderosas que resuenan con el trabajo preciso y meticuloso de la marca”.
Una colaboración basada en valores compartidos
La alianza entre IWC Schaffhausen y el diseñador se articula en torno a tres pilares fundamentales. En primer lugar, la longevidad, entendida como la durabilidad de los relojes de la firma y la vida renovada que PET Lamp otorga a materiales desechados. En segundo lugar, la sostenibilidad, presente tanto en la filosofía de la marca relojera como en el enfoque artesanal del diseñador. Y, por último, el empoderamiento comunitario, ya que ambos colaboran estrechamente con artesanos y comunidades que preservan técnicas tradicionales y generan oportunidades económicas locales.
El árbol creado para esta edición ha sido tejido a mano por artesanos de Ruanda y toma como referencia estética la colección Ingenieur de IWC. Su diseño minimalista incluye una estrella mecanizada e iluminada como símbolo de esperanza, mientras que la base en negro mate con interior dorado ofrece un contraste equilibrado entre sobriedad y calidez.
La pieza estará expuesta durante una semana en la boutique de IWC en Madrid antes de la subasta organizada por Christie’s en una cena benéfica. Los fondos recaudados se destinarán íntegramente a tres entidades dedicadas a proyectos educativos: Fundación Dádoris, que apoya a jóvenes sin recursos; Fundación Alas, centrada en personas con discapacidad intelectual; y Fundación Tacumi, que trabaja con niños con necesidades especiales de aprendizaje.
Con esta propuesta, IWC Schaffhausen y Álvaro Catalán de Ocón refuerzan su compromiso con la sostenibilidad, la responsabilidad social y la artesanía, iluminando la boutique madrileña con una obra que estará disponible del 17 al 24 de noviembre.