Cumplir un cuarto se siglo siempre es motivo de celebración, especialmente en el sector hotelero que tanto ha sufrido en los últimos tiempos. Esta es la realidad que el Hotel Orfila de Madrid ha querido poner en valor en su aniversario a través de uno de sus puntos fuertes, la gastronomía, y para ello ha recurrido al talento de Mario Sandoval, Premio Nacional de Gastronomía y poseedor de dos estrellas Michelin, una estrella verde y tres soles Repsol en el restaurante Coque.
Sandoval es además chef ejecutivo de El Jardín de Orfila y, como tal, ha creado para la ocasión un menú especial en el que se repasan los mejores platos que se han servido a lo largo de los 25 años de trayectoria del local. Para ello, ha actualizado y reinterpretado algunas de las elaboraciones que han estado presentes en las diferentes cartas del restaurante desde su apertura con motivo de este aniversario hasta elaborar una propuesta muy especial que ya se puede degustar.
«Repasar la historia de Orfila a través del sabor ha sido una experiencia de lo más excitante y enriquecedora para mí», ha explicado Mario Sandoval sobre este proyecto con el que se festeja el cumpleaños de este hotel levantado sobre un palacete abandonado que esconde verdaderas obras de arte.
Este menú 25º aniversario del primer Relais & Châteaux de la capital española está compuesto por un entrante, un primer plato, dos platos principales y un postre.
Una refrescante sopa de almendra con foie a la plancha, cereza y perlas de palo cortado marca el comienzo de este homenaje gastronómico que sigue con un ravioli de crustáceo con salsa de champagne y azafrán justo antes del salmonete escabechado con tikka masala y romescu de cacahuete.
A continuación llega el turno del pichón a baja temperatura con puré de su estofado y setas de temporada, un plato que se incorporó a la carta en el 2016 y que es uno de los más alabados de la historia del hotel Orfila.
Para cerrar la propuesta los comensales podrán degustar el coulis de cereza, chocolate especiado y crema de café y las migas de chocolate con frambuesa liofilizada, espuma de leche y helado de yogurt. Un dulce que es emblema de la casa y que está considerado uno de los mejores postres de hotel de Madrid.
Todo un disfrute para los amantes de la buena mesa que se ofrece a cada comensal a un precio de 89 euros con la opción de añadir la armonía de vinos por 45 euros adicionales.