Rolex, recordando los orígenes

Rolex, recordando los orígenes

Rolex, recordando los orígenes

En 1908, Hans Wilsdorf ideó el nombre Rolex para firmar sus creaciones relojeras y registró la marca en Suiza. Ahora, aquella fecha se convierte también en el nombre de la nueva colección que atesora algunos de los valores que han distinguido a la marca. El 1908 es una propuesta marcada por la elegancia y la sobriedad. De ello se encarga la fina caja rematada con un bisel abombado y sutilmente estriado.

Declinado en oro amarillo o blanco, otro hecho destacable es que la caja luce un fondo transparente que permite apreciar el calibre 7140 que impulsa su precisión horaria. Lo hace sobre una esfera marcada por esa sobriedad y limpieza, casi de corte minimalista, ya sea en un tono blanco intenso o en negro. La esfera presenta los números arábigos 3, 9 y 12, mientras el resto de las indicaciones horarias se hace a través de índices facetados, para dejar el conveniente protagonismo al contador de segundos emplazado a las 6 horas. La aguja de las horas, por su parte, se distingue por su círculo casi en el extremo, mientras que la de los minutos tiene forma de espada.

La silueta de la caja de oro de 18 quilates, así como el diseño de la esfera del 1908 reinventan el espíritu clásico que caracteriza las creaciones de la firma suiza.

El 1908 está equipado con el calibre 7140, un movimiento presentado este año que incorpora el escape Chronergy, así como la espiral Syloxi y los amortiguadores de golpes Paraflex. Se distingue asimismo por sus puentes decorados Côtes de Genève, pero con el estilo de la casa. Como todos los Rolex, el Perpetual 1908 también cuenta con la certificación de Cronómetro Superlativo, que garantiza su excelente rendimiento en la muñeca.

Para rematar la propuesta, este nuevo modelo 1908 luce su elegancia con una correa de piel de aligátor marrón o negra, provista del doble cierre Dualclasp.

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