Junto a Anya Taylor-Joy (Gambito de dama, El menú), Chris Hemsworth protagoniza una nueva entrega de la saga Mad Max, que nació en 1979. En esta nueva película, la joven Furiosa es expulsada del Lugar Verde de Muchas Madres y cae en las manos de una horda de motoristas liderada por el Señor de la Guerra Dementus. En este contexto se ve obligada a sobrevivir y encontrar el camino de vuelta.
El filme se presentó en Cannes el pasado 14 de mayo. El Festival acoge durante una semana a importantes figuras del cine internacional que acuden a presentar sus últimos trabajos y se postulan para alzarse con la Palme d’Or el 25 de mayo. Cientos de celebridades pasean por la alfombra roja en esos días, acaparando la atención por sus looks.
Chris Hemsworth y Elsa Pataky, su mujer, acudieron el primer día de uno de los festivales más importantes de la temporada cinematográfica, tras haber sido uno de los anfitriones de la gala MET en Nueva York junto a rostros tan reconocidos como Zendaya o Jennifer López. Así, confirmaba el excelente momento profesional y personal en el que se encuentra.
Elegancia personificada
El actor australiano ha demostrado en estos días de presentaciones que un hombre en traje no tiene por qué ser aburrido si la vestimenta y los complementos en cuestión están bien elegidos. Eso parece que él lo hace a la perfección. El primer día de festival se presentó con un traje blanco y negro de Tom Ford y el reloj Alpine Eagle Frozen, de diamantes y zafiros diseñado por Chopard.
También le hemos visto a rayas, con estampados y monocromático, que parece ser su opción preferida. En la premier de Londres del 17 de mayo apareció con un traje de su firma predilecta, Tom Ford: chaqueta, pantalón y chaleco de color azul celeste y la camisa semiabierta de satén en un tono más claro.
Como colofón llevaba unos botines blancos con detalles en negro. Con cada alfombra roja comprobamos que Chris Hemsworth es uno de los hombres más elegantes del mundo, un referente en la moda masculina. Este nuevo outfit ha confirmado lo que ya sabíamos, aunque nunca dejará de sorprender en cada evento al que asiste.