Una auténtica carta de amor a su lugar de nacimiento. Eso es lo que Ferragamo ha hecho en la nueva campaña que acaba de lanzar en la que se mezclan prendas de la colección otoño-invierno con otras ideadas para la próxima primavera.
La ciudad es la gran protagonista de las fotografías tomadas por Juergen Teller, quien ha querido a través de su cámara mostrar la realidad actual de este entorno lleno de historia. «En el tiempo que vivimos, eso es lo que la gente busca, a mí me interesa observar a personas reales en Florencia y cómo lucen Ferragamo», explica Maximilian Davis, director creativo de la firma, quien ha desvelado que realizar este proyecto fue una gran aventura. «Durante tres días, exploramos la ciudad juntos. Se sintió libre, como si todos hubiéramos ido de viaje, y fue divertido», afirma.
Ferragamo hace toda una oda a Florencia recorriendo algunos de sus lugares más icónicos, los cuales están vinculados a la narrativa y el patrimonio histórico de la marca. Uno de ellos es el Palazzo Spini Feroni, actual sede de la firma. Esta imponente residencia histórica situada a lo largo del Lungarno conocida por su arquitectura medieval florentina, con una fachada de piedra y una torre almenada que da al río Arno fue adquirida por el sello en la década de 1930 y alberga el Museo Ferragamo.
Este edificio sirve como punto de referencia para todas las ubicaciones, entre las que destaca también la Loggia dei Lanzi, ubicada en la Piazza della Signoria. Originalmente planeada para albergar discursos y ceremonias públicas, fue construida entre 1376 y 1382 por encargo de Baccio di Giovanni y Francesco Talenti y es reconocida por sus esculturas del Renacimiento y del período barroco entre las que destacan Perseo de Benvenuto Cellini y El rapto de las sabinas de Giambologna.
Cada uno de los rincones que se muestran en las fotografías descubren la esencia del sello italiano y desvelan parte de la personalidad de los personajes que forman parte de esta campaña de Ferragamo.
Uno de estos personajes es el diseñador gráfico Peter Saville. Él, que presume de ser un gran cliente de la casa y se encargó de supervisar la reciente modernización de su logo, posa para Juergen Teller en la Galleria Romanelli. Este taller de escultura histórico ubicado en el distrito de San Frediano en Florencia fue fundado en 1860 por el escultor Pasquale Romanelli y es la quinta generación de este artista quien se encarga de su gestión.
El Palazzo Corsini que es un ejemplo de la arquitectura barroca florentina construido entre 1650 y 1700 para la noble familia Corsini que en la actualidad alberga una colección de piezas de arte privadas, incluyendo a maestros italianos como Caravaggio, Botticelli y Rubens, es donde ha posado para Ferragamo la consultora creativa Maïa Tellit Hawad.
La modelo brasileña Raquel Zimmermann, por su parte, ha sido retratada como otro de los rostros de esta campaña tan especial en Caffè Rivoire. Este local lleno de encanto está ubicado en la Piazza della Signoria en Florencia, se abrió en 1858 y pronto se convirtió en el lugar de encuentro para artistas, intelectuales y políticos, incluidos escritores, pintores y revolucionarios.
«Ferragamo y Florencia hablan el mismo idioma, comparten la misma historia, así que quería volver al inicio de la historia», ha contado el director creativo de Ferragamo sobre esta campaña que sirve para enamorarse de la ciudad y de ese exquisito armario con piezas y complementos de la firma que se ve en cada una de las instantáneas.