Uno tiene sus básicos. Son productos cosméticos para hombre, difíciles de encontrar en España y con una historia personal detrás. Cosmética independiente con mitología, para resumir de manera algo hip. Y no es una tienda porque también se puede entrar a leer, ver este video o aquel otro, y no siempre hay que comprar.
Laconicum es una mina para cómodos, vagos, desastres, y curiosos porque aclaran muy bien “qué es” y “para qué sirve” cada producto como si lo contara un amigo, no un químico ni un farmacéutico. Y, algo importante, todo lo que venden queda bastante bien en el cuarto de baño y provoca envidias. Los estudios revelan que a los hombres les importan tres temas en lo que se refiere a cuidado personal. Y aquí está Laconicum para resolverlos.
¿La barba? Obsesiona, para bien y para mal. Incluso es posible que haya llegado su fin como tendencia. Para acabar con ella, la solución puede ser Muhle. Esta firma es eficaz como corresponde a una marca alemana que lleva 70 años de vida. Artesanía al servicio del apurado, que en este caso se torna pausado. ¿La tripa? Un caballero no tiene tripa… o al menos eso cree. Para ello hay que usar cada día el Get Waisted Body Shaper de Mama Mio. ¿Ojeras? Está demostrado que los hombres son mucho más adictos al contorno de ojos que las mujeres, porque sufrimos mucho más por el amor… Y además siempre está la obsesión por la exfoliación y las arrugas.
Y si quiero reducir mi rutina al mínimo, ¿qué puedo usar? Un buen jabón para limpiar y una hidratante. Así de simple. Con estos dos productos, un hombre sobrevive. Con algunos más, vive. Que sufran… los que no se cuidan.