Hace ya más de 30 años, en 1988, Carlos Moro se lanzó a una aventura entonces incierta: recuperar la tradición familiar de cultivar viñedos y dedicarse a la elaboración de vinos excelentes en las mejores zonas de España. En la actualidad, Bodegas Familiares Matarromera está presente en seis denominaciones de origen a través de 10 bodegas con algunas características en común: se trata de proyectos muy cualitativos de elaboraciones limitadas que ofrecen lo mejor de la tierra con el máximo respeto por el medio ambiente. Visitamos algunas de estas bodegas en cinco paradas.
Comenzamos en Galicia, en el último proyecto incorporado al grupo. Se trata de Bodega Sanclodio, situada en el marge izquierdo del río Avia, con cuatro fincas donde prosperan las variedades autóctonas de treixadura, albariño, loureiro y godello. La bodega fue, hasta mayo de este mismo año, propiedad del cineasta José Luis Cuerda y, bajo su dirección, desde su salida al mercado en 2003 se situó inmediatamente entre los vinos de mayor prestigio de toda la zona.
A escasos kilómetros de Sanclodio se sitúa la pequeña parcela que da origen a CM Viña Tenencia, el resultado de la primera incursión de Carlos Moro en la DO Ribeiro en colaboración con viticultores de la zona. Una zona con los viñedos de una edad media y con la producción bien regulada, orientada al norte, lo que le confiere una buena acidez y frescura para cultivar las cepas de las variedades autóctonas bien representativas de esta denominación de origen: treixadura, godello y albariño. Las tres están presentes en CM Viña Tenencia 2021, un vino blanco con una cuidada crianza en finas lías que le aporta carácter y equilibrio.
La siguiente parada nos lleva a Rioja Alta, a los maravillosos parajes de San Vicente de la Sonsierra, municipio donde se encuentra Bodega Carlos Moro, un proyecto con nombre propio y uno de los más personales de la compañía. Cuenta con más de 20 hectáreas de viñedo propio repartidas en parcelas ubicadas en La Rioja y Labastida, en Álava. Precisamente un viñedo plantado en vaso en 1940 en esta localidad, Viña Garugele, es uno de los pocos Viñedos Singulares de la DOCa Rioja, de reducida superficie y bajo rendimiento y, por tanto, de producción muy limitada. El resultado es un vino único, de gran elegancia y personalidad.
De Rioja, a Ribera del Duero, para detenernos en una de las bodegas más innovadoras y sostenibles de nuestro país: Bodega Emina que, entre otras referencias, cuenta con Emina Emoción, un vino de autor, a base de tempranillo y una cuidada crianza en barricas de robles francés, en el que condensar todas las emociones de la tierra, de la vid, del viento, del sol y de las gentes de la Ribera del Duero en un vino de autor.
El nombre que recibe Bodega Cyan no es casual. Por un lado, representa los reflejos azulados propios del vino, pero también cuenta la curiosa historia de una pequeña ave, llamada Cyanopica, de poco más de 30 cm cuyas alas y larga cola, de color azul intenso son características. Este ave tiene su hábitat en dos únicos lugares en el mundo, Asia, a casi 10.000 km de distancia, y la zona de Toro. Aquí se ubica Cyan, una bodega 100% ecológica que elabora vinos de limitada producción y muy cualitativos con la uva autóctona de la D.O. Toro, la Tinta de Toro, como Cyan Prestigio, un tempranillo que acaba de recibir la Medalla de Oro del prestigioso concurso internacional de Decanter.
«Compartimos un viaje soñado por mí hace décadas –afirma Carlos Moro sobre este recorrido–. Un viaje a través de algunas de las bodegas que tenemos en diversas denominaciones de origen, con el objetivo de trasladaros la riqueza de nuestras tierras y parte del alma de todos los que formamos esta gran familia”.