Wiko ha lanzado una nueva línea en sus móviles para aquellos jóvenes cosmopolitas que quieren disfrutar de las últimas tecnologías sin necesidad de gastarse tanto dinero. Así, fijándose en estos consumidores millennials, más exigentes y grandes aficionados a la fotografía, el nuevo smartphone, WIM, se ha especializado en la imagen. Para ello han diseñado un nuevo dispositivo que hace dos fotos al mismo tiempo, una en blanco y negro y otra en color, y las funde en una sola, simulando el funcionamiento del ojo humano. Asimismo, con el objetivo de dotar de mayor realismo a las imágenes, han preparado a la cámara principal para que capture tres veces más luz.
Esta cámara dual cuenta con dos sensores de 13MP cada uno, además de permitir grabar en 4K, la resolución usada en la industria cinematográfica. Por otro lado, la cámara frontal cuenta con una resolución de 16MP y cuenta con un flash LED de luz tenue que garantiza la calidad de las imágenes incluso en entornos con poca luminosidad, al mismo tiempo que evita el molesto y artificial efecto fantasma en los selfies.