La llegada de Taylor Swift a Madrid ha causado toda una revolución. La ciudad ya llevaba días preparándose para esta importante cita con un dispositivo especial de seguridad que pasa por cortar calles, instalar puestos de merchandising y hasta zona destinada al intercambio de pulsera para los fans.
Por supuesto el plan trazado para preservar que todo saliera como se esperaba pasaba por blindar a la artista desde el mismo momento de su aterrizaje en la capital española, algo que se ha conseguido gracias a que en cada uno de los pasos que ha dado ha contado con una comitiva que le ha acompañado en diferentes coches de lujo, de entre los cuales ha llamado la atención el que ha elegido ella para desplazarse por la ciudad, el Defender.
Nada más bajar de su jet privado, Taylor Swift se ha subido en un vehículo junto a su guardaespaldas para así desplazarse con total seguridad durante los dos días que estará en Madrid para ofrecer los únicos conciertos que forman parte de su exitoso The Eras Tour.
El elegido como coche de confianza por la cantante de Champagne problems o Shake it Off ha sido un Defender, un 4×4 que ha sido completamente renovado en cuanto a confort y el lujo para así combinar el alto rendimiento con el estilo de vida de alto nivel. De hecho, está diseñado, desarrollado y fabricado en el Reino Unido y está pensado para rodar por cualquier terreno con elegancia y distinción. Cuenta con un sistema de control de tracción que logra el mejor avance en cualquier superficie, mientras que el control dinámico de estabilidad mantiene la trayectoria en caso de que uno o más neumáticos pierdan agarre.
Forma parte de las marcas de la House of Brands de JLR junto con Range Rover, Discovery y Jaguar el Defender en el que se ha visto a Taylor Swift entrando y saliendo del estadio Santiago Bernabéu antes y después de su comentado show, tras el cual ha descansado en el exclusivo hotel Rosewood Villa Magna que se encuentra a unos tres kilómetros del recinto y donde dicen que se aloja en la suite Royal Anglada House de 410 metros cuadrados situada en la novena planta del edificio situado en pleno Paseo de la Castellana.
Valorado en más de 80.000 euros –en función del pack con el que se personalice el precio puede ascender a más de 168.000 euros– el Defender cuenta con unos lujosos asientos individuales bautizados como Captain Chairs que no solo ofrecen comodidad incomparable en la segunda fila, sino que también crean un pasillo despejado para acceder con facilidad a la amplia tercera fila.