¿Qué tienen en común el flamenco y la sostenibilidad? Manuel Rodríguez tiene la respuesta. El luthier, fundador de la empresa MR, conocida por sus icónicas guitarras artesanales, ha logrado unir ambos conceptos en una nueva propuesta presentada recientemente en la feria musical NAMM de Los Ángeles, Estados Unidos: el MR Nature Percusión. Acostumbrado a pasear la guitarra clásica por tierras norteamericanas, Rodríguez define su nueva creación como «otro granito de arena español para los demás».
Su fábrica en Esquivias (Toledo), con más de 6.500 m2 dedicados a la industria musical, es el ejemplo perfecto de la simbiosis entre tradición y modernidad, una filosofía que exporta a esta nueva línea de instrumentos. Cajones flamencos, cabongos, cajongas… toda una disertación de percusión a la carta que tiene su origen en la innovación y el respeto al medio ambiente, gracias al delicado trabajo de la madera y una sola capa de barniz.
Musicalmente, el sonido también sorprende gracias, en gran medida, a su acabado natural y sus materias primas de primera calidad como el abedul, palosanto y abeto macizo. Nadie mejor que el músico Raimundo Amador para comprobarlo y confirmarlo. El guitarrista y cantante sevillano fue el encargado de deleitar al público durante el pasado NAMM con la fusión de los instrumentos de Manuel Rodríguez. «Estamos orgullosos de seguir innovando en el sector de los instrumentos artesanales tras más de un siglo de historia”, reconoce el fundador.
Pero ha sido en los últimos veinte años cuando la empresa se ha consolidado como un referente de los procesos artesanales. Apoyados en la más novedosa tecnología, sus luthiers siguen apostando por trabajar la madera con el mismo esmero que el primer día. Actualmente, las guitarras clásicas y flamencas MR abarcan todas las gamas, desde el nivel estudio a instrumentos completamente profesionales. Junto a la nueva propuesta de percusión, el concierto, ahora más que nunca, está servido.