Una de las cosas más valoradas de la estancia en un hotel es el desayuno. Básicamente para muchos no se trata de una simple comida matutina sino de un evento en sí mismo, una oportunidad para deleitarse con una variedad de sabores que ayudan a iniciar la jornada de un modo insuperable.
Aquí no hay la limitación de tiempo ni de ingredientes disponibles como sí sucede cuando se está en casa, sino que todo acompaña para satisfacer nuestros deseos matutinos. Por eso cada establecimiento ofrece distintas alternativas en función de su estilo, las costumbres locales de dónde está situado y la demanda de los huéspedes a los que desea satisfacer, lo que vuelve aún más emocionante la experiencia para quienes ansían probar nuevas propuestas.
Una de esas propuestas que merece la pena descubrir es la de este hotel de Marbella que directamente sugiere comenzar el día con un auténtico festín.
El Fuerte Marbella, un hotel cinco estrellas ubicado en pleno paseo marítimo de Marbella a solo cinco minutos a pie de la conocida Plaza de los Naranjos en el Casco Antiguo cuyo proyecto de interiorismo se le atribuye al diseñador chileno Jaime Beriestain, cuenta con una cuidada propuesta gastronómica en la que se ha puesto especial énfasis en el desayuno.
La primera comida del día es la más importante para este establecimiento y por ello ha creado un menú de ocho pases elaborado con ingredientes de calidad de productores locales que ha bautizado como Charme&Taste.
Ocho platos para los paladares más exquisitos
El recorrido comienza con la bebida que muchos consideran revitalizante por el chute de energía que les provoca, un shot de jengibre, que en este caso está elaborada con limón de la axarquía. De ahí se pasa a la selección de panes masa madre con mantequillas y mieles, a lo que le siguen unas ostras y un gofre benedictino.
Tras estos platos llega el turno de una tortilla melosa de patata y espinaca que va seguida de una degustación de quesos de la tierra y de un brioche de serranito. Y, para terminar, un dulce malagueño que sirve como guinda.
Este sorprendente repertorio no es el único que ofrece el hotel marbellí para su clientela. La otra experiencia de desayuno que se propone para empezar el día es un completo bufé que combina desde jamón Cinco Jotas cortado en directo, hasta un apartado de bollería artesanal y maridaje de panes con mantequillas artesanas, salazones locales y smoothies; pasando por una zona fresh en la que elegir combinaciones totalmente personalizables hechas en directo por un chef y la posibilidad de solicitar elaboraciones de carta como son el lobster roll o los churros con chocolate, entre otros.
