La terraza del restaurante José Carlos García, situada en un enclave privilegiado del Puerto de Málaga, abre sus puertas una temporada más como uno de los espacios imprescindibles del verano en la ciudad. Frente al mar y con vistas a la Capilla de la Virgen del Carmen y la silueta de La Alcazaba, el chef malagueño presenta una nueva propuesta de picoteo de autor, concebida para compartir y disfrutar en armonía con los champagnes Laurent-Perrier.
Fiel a su filosofía basada en el producto local y la cocina andaluza con mirada contemporánea, García ha diseñado una selección de bocados que combinan técnica, sabor y presentación cuidada. En la carta destacan creaciones como el sam de quisquillas con brotes de cilantro, tartaleta de vieiras con remolacha y mielrama, carpaccio de gamba blanca con vinagreta de piñones y estragón, ravioli de cigala con foie de pato fresco o buñuelos con crema agria y Antonius Caviar. No faltan opciones tradicionales reinterpretadas, como la croqueta casera de guiso estofado, una tabla de quesos malagueños o postres con identidad propia, como las yemas con yogur y cítricos, el chocolate avellana con helado Ferrero o el sorbete de frambuesas.
El maridaje ha sido cuidadosamente pensado junto a la Maison Laurent-Perrier, con la que el chef mantiene una estrecha colaboración. En esta edición, se podrán degustar algunas de sus cuvées más reconocidas: Laurent-Perrier Brut La Cuvée, que representa la esencia del estilo de la bodega; Cuvée Rosé, emblemático desde 1968; el elegante Millésimé 2015; o el Blanc de Blancs Brut Nature, elaborado sin azúcares añadidos. También se incluyen referencias más excepcionales como Grand Siècle Iteración Nº26 o Alexandra Rosé 2004.
Como novedad de esta temporada, se incorpora Heritage Brut, el primer champagne brut 100% vinos de reserva de la Maison. Se trata de un ensamblaje de uvas chardonnay y pinot noir, con una notable proporción de Grand Crus, que destaca por su complejidad, frescura y profundidad, fiel al estilo de Laurent-Perrier.
Para José Carlos García, esta propuesta representa una forma de acercar su cocina a un público más amplio, manteniendo los estándares de calidad que le han valido una estrella Michelin y dos Soles Repsol: “Cada año damos un paso más en esta propuesta que ya forma parte del verano en Málaga. Es una experiencia más desenfadada que la del restaurante, pensada para compartir bocados especiales con una copa de champagne excepcional. Laurent-Perrier representa elegancia, tradición y también innovación, y eso encaja perfectamente con lo que queremos ofrecer aquí”.
Abierta al aire libre, la terraza se convierte en un lugar ideal para disfrutar de la cocina de autor en un entorno único, con el puerto deportivo de fondo, el sonido del mar y la luz mediterránea como protagonistas. Esta temporada estival, Málaga suma así una propuesta singular para quienes buscan una experiencia gastronómica informal pero sofisticada, en perfecta sintonía entre el alma local y el savoir-faire francés.
