Ámsterdam siempre es un destino a plantearse a la hora de hacer una escapada. Por sus bellos canales, por sus inabarcables museos, por su brillante arquitectura, por sus reconocibles mercados y por su estilo de vida que en continua reinvención, la ciudad bien merece una visita en algún momento que se tercie ya sea en pareja, con amigos, solo o en familia.
Si entra en tus planes viajar hacia la capital de Países Bajos has de saber que existen multitud de lugares interesantes en los que poder hospedarse. Los hay de distintas categorías y estilos pero en este caso nos vamos a centrar en recomendarte algunos de los hoteles más originales que vas a poder encontrar entre sus calles. Edificios en desuso que gracias a un minucioso trabajo de restauración han sido reconvertidos para esta función y ante los que no vas a quedar indiferente.
Bunk Amsterdam
En el moderno barrio de Noord está situado este hotel de diseño llamado Bunk que es realmente sorprendente. Está instalado en una antigua iglesia monumental de la que se han consevado algunos elementos originales como la fachada o los arcos y se han fusionado otros de diseño futurista en los que además se pueden encontrar pinturas y esculturas de artistas contemporáneos locales. Se pueden reservar habitaciones básicas o cápsulas, mucho más pequeñas en las que se puede dormir a partir de 60 euros la noche. Toda una experiencia que no deja a nadie indiferente.
Sweets Hotel
En las 28 antiguas casas-puente de Ámsterdam que durante más de cien años alojaron a los guardianes encargados de abrir al tráfico de barcos las impresionantes estructuras se encuentra el hotel Sweets, el único en su categoría. Cada una de las casas es una pequeña suite con capacidad para dos personas que ofrece las vistas más especiales de los canales. Algunas de ellas están consideradas monumentos nacionales.
The manor
Parece mentira que el Hospital Civil diseñado por el arquitecto AL van Gendt que abrió sus puertas en 1891 sea hoy uno de los hoteles con más encanto de Ámsterdam. Cuando se inauguró ya estaba considerado el centro médico más moderno del país tanto por su flamante edificio como por las tecnologías que se utilizaban en él. Funcionó como hospital durante más de cien años y desde 2011 funciona como alojamiento bajo el nombre de The manor.
Faralda
Uno de los hoteles más exclusivos de Ámsterdam está ni más ni menos que a 30 metros de altura en la Grúa 13 que se construyó originalmente en 1951 como parte de un astillero industrial. Más de 1.195 euros cuesta la noche en una de las tres suites de Faralda que tienen dos niveles, una en la parte superior con dormitorio rodeado de paneles de vidrio y una bañera rodeada de obras de arte, y otra segunda planta con baño independiente en la que la ducha tiene las paredes decoradas con piezas antiguas de un crucero oceánico.
Conservatorium
La encarnación perfecta de lo que se conoce como lujo silencioso se respira en Conservatorium, el hotel de cinco estrellas que fue construido a finales del siglo XIX por el arquitecto holandés Daniel Knuttel. Antes de ser un alojamiento con todo lujo de comodidades en el selecto barrio de los museos, este edificio funcionó primero como banco y después como escuela de música.