En un sector en plena efervescencia como el del lujo, Andorra se posiciona como destino preferente. Está de moda como elección de un visitante de alto poder adquisitivo que autoridades y empresarios del Principado quieren mimar. En este contexto se enmarca la creación de UNNIC, un polivalente centro de ocio, entretenimiento y gastronomía exclusivo que acoge, además, el Gran Casino Andorra.
Abierto en marzo de 2023 es un centro en auge, referente de exclusividad y seña de identidad de esa Andorra de alta gama que gana enteros. Con una inversión de 32 millones de euros, en sus siete plantas se reparten desde sports bars hasta restaurantes de alta cocina –todos bajo la tutela del chef Thierry Burton–, también una discoteca, espacios para eventos –ya ha albergado convenciones internacionales y presentaciones de marcas como Chanel y Givenchy entre otras marcas de lujo, shows variados, espectáculos musicales y de teatro y zonas VIP.

El éxito de UNNIC Andorra se refleja en los eventos realizados durante 2024, que consolidan su estatus como el nuevo «place to be» en el país. Más de 250.000 personas visitaron UNNIC, se llevaron a cabo 120 eventos corporativos y se gestionaron 14.000 reservas en sus exclusivos restaurantes. Todo ello confirma el compromiso con el lujo de este emblemático lugar y reafirma el objetivo constante de UNNIC Andorra en crear experiencias memorables que inspiren a los visitantes a compartir y regresar.
Fue también el lugar elegido para una cita muy especial: una cata del vino Nabal Gran Reserva 2018, uno de los vinos más exclusivos de las bodegas Nabal de Ribera del Duero. Elaborado con la variedad Tempranillo, sorprende por sus aromas torrefactos, fruto de 26 meses en barrica, y su carácter elegante y complejo en boca. La cata contó con la presencia de cuatro figuras que tienen mucho que decir en el posicionamiento de Andorra como destino de lujo: Jordi Torres, ministro de Turismo; el notario Isidre Bartumeu; Daniel Armengol, presidente de la constructora Grup Heracles; y Marc Martos, consejero delegado de Jocs S.A., la empresa que gestiona el complejo UNNIC.
En las reflexiones vertidas durante la cata, coincidieron en loar “los lujos intangibles de Andorra, como el paisaje, el estilo de vida y la seguridad” (Armengol); en advertir de la necesidad de controlar el crecimiento turístico reforzando su posición como “destino de excelencia” (Martos); en acentuar la “atención a los nuevos residentes de alto poder adquisitivo” (Bartumeu) y en destacar que tantos atractivos en apenas 468 km² (la décima parte de, por ejemplo, la provincia de Pontevedra) convierten a Andorra “en un auténtico oasis”. Asimismo, subrayó que el país emerge como un destino atractivo para inversores que buscan calidad de vida y exclusividad.
El ministro añadió la importancia del turismo de lujo y la inversión extranjera y subrayó el esfuerzo que está haciendo Andorra Turismo con Andorra Selected, un sello de calidad que crece cada vez más y en el que productos y servicios premium del país se suman para garantizar una experiencia de lujo. La cifra de 9,5 millones de visitas en 2024, en un país con una población de tan solo 90.000, consolida al Principado como un referente del turismo de lujo en Europa. “Estamos trabajando con estadísticas detalladas para conocer las preferencias de los turistas según de cada país de origen”, añadió Torres.
En su compromiso con la excelencia, UNNIC Andorra se ha convertido en un destacado polo de atracción turística con propuestas exclusivas cuidadosamente diseñadas que invitan a disfrutar de lo mejor de la vida, recreando un universo de sensaciones en un enclave privilegiado que se integra armoniosamente con el esplendor del paisaje pirenaico. Ofrece vistas impresionantes que enriquecen y completan las experiencias superando así las expectativas.