Ese cuento de hadas tan común en la ficción, en la que un talento descubre al protagonista por la calle y le ofrece la oportunidad de su vida, ocurre también en la realidad. A veces. Le pasó a Xavi Serrano, entonces un joven más preocupado por el deporte que por la moda, con quien la persona adecuada se cruzó en el momento justo por las calles de Barcelona. Y le propuso convertirse en modelo. “Me vino a la cabeza todo lo que podría pasar si me iba bien en la moda –cuenta a Gentleman–, también a lo que tendría que renunciar. Pero tuve un buen feeling y aposté por ello”. Lo hizo, además, muy en serio: siguiendo el consejo de su colega y en cierto modo mentor Andrés Velencoso, pronto se fue a Nueva York, por donde, según le dijeron, pasaba sí o sí el éxito. Y acertó. Ahora, todo el mundo habla de ese joven catalán que pasea por las principales pasarelas de moda las propuestas de firmas como Dolce & Gabbana, Emporio Armani o Givenchy o protagoniza campañas con Carolina Herrera o la marca de gafas Mó, de la que se ha convertido en embajador y fan, para presentar ahora la nueva colección de sol primavera-verano 2021. “Es un placer ser embajador de Mó. Es una marca que tiene mucha diversidad en sus colecciones y que se adapta a las necesidades que tengas en cualquier momento”.
La carrera de Xavi Serrano transcurre rápida. Apoyado en un físico que debe, en parte, a la genética –“la altura y constitución delgada, imprescindibles en el mundo de la moda”– y en parte a la disciplina –“ejercicio, buena alimentación y, en general, una vida sana”–, a los pocos meses de empezar llamó la atención de Dolce & Gabbana, que le fichó para abrir su desfile en la Fashion Week de Milán en 2015 y le situó así en un privilegiado escaparate para el resto del sector. “Cada modelo tiene sus timings –cuenta Serrano– y las oportunidades te llegan en diferentes momentos. Yo tuve la suerte de que llegó pronto”.
Cosas de los tiempos, el joven catalán también exhibe en su currículum un tirón envidiable en las redes sociales, con cerca de un millón de seguidores en Instagram y un canal de Youtube con más de 36.000 inscritos. “Con las redes sociales –explica al respecto–, el mundo en general ha cambiado. Y los modelos hemos tenido que adaptarnos. Ahora, muchos clientes piden, además de que uno sea modelo, que también tenga seguidores y sea influyente. Es otro trabajo paralelo que hay que hacer, pero que abre muchas puertas si se hace bien, aunque nadie te regala nada y hay que trabajar constantemente también en ese aspecto”.
Esas ganas de hacer las cosas bien, en una situación confusa como la actual, le ha llevado a probar con otras facetas relacionadas con el sector de la moda. Este último año ha puesto en marcha una productora de contenido digital, llamada Offcode, y que se une a otro proyecto, la marca de joyas Inaurem, que lanzó hace dos años. Iniciativas que compagina con una carrera en la que disfruta, sobre todo, de “la posibilidad de conocer otros lugares y culturas” y lleva peor “que casi siempre estás solo, alejado de tu familia y amigos”.
Aunque la conexión entre Xavi Serrano y Mó, de Multiópticas, surgió hace algún tiempo, ha sido ahora, una vez que el modelo ha aterrizado de nuevo en España desde Nueva York, cuando ha podido concretarse. De entre los diferentes diseños de gafas que incluye la colección Mó Sun Embajadores, Serrano elige entre sus favoritas los de la línea aviador, que considera, además, “elegantes”. Y añade: “Pero intento ser versátil y llevar diferentes tipos de gafas según la situación: un look de playa, un look más clásico, algún modelo más atrevido para ir a la moda”. Coincide Serrano en la campaña de Mó, precisamente, con una de las colegas a las que aprecia, Eugenia Silva. “Admiro a los modelos que llevan tiempo viviendo de esto y que se han mantenido a lo largo de los años”, como Andrés Velencoso o la propia Silva. Oriol Elcacho y Rocío Crusset también participan en la campaña de verano de Mó.
Fotografía: Jesús Isnard.