De tapas por Ávila: la santa disfruta a lo grande
Este año la XIII edición del certamen gastronómico Ávila en tapas se celebra del 26 al 30 de junio y perdérselo es casi un sacrilegio al buen comer. Casi medio centenar de bares participaron en la pasada edición y eso traducido en sonrisas supone casi medio centenar de bocados sorpresa acompañando a nuestras consumiciones. Una […]
Este año la XIII edición del certamen gastronómico Ávila en tapas se celebra del 26 al 30 de junio y perdérselo es casi un sacrilegio al buen comer. Casi medio centenar de bares participaron en la pasada edición y eso traducido en sonrisas supone casi medio centenar de bocados sorpresa acompañando a nuestras consumiciones. Una gozada.
Venta El Colmenar (Vicolozano - Carretera de Tolbaños, 2) se alzó como ganador del año pasado con su tapa “Rulo de puerro relleno”, que destacó por su sencillez y gusto por la huerta abulense. Este local es muy frecuentado por la gente del lugar y suele haber pocos turistas, de momento. Además de tapearse de lujo se puede disfrutar a muy buen precio de excelentes asados en su restaurante, al abrigo de una chimenea que mitiga los duros inviernos de esta zona.
El segundo puesto fue para la Cafetería 1966 Mangas (C/ de los Comuneros de Castilla, 3) por su ingenioso “Crocanti”, un helado con caramelo de vino cubierto con crocante de almendra. Un sorprendente “renovarse o morir” de un local de toda la vida donde se puede disfrutar de buenos pinchos, patatas con mayonesa y la “multigalardonada” Ojuela, una especie de empanadilla bien hermosa. Y cerrando el pódium del 2012 Las Cancelas (C/ Cruz Vieja, 6) con su tapa de “Solomillo de ibérico hojaldrado con boletus y mermelada de cebolla”, que conquista al oído y paladar por igual, y de la vista ya se encarga el ambiente que confiere ubicarse en una antigua posada del S.XV. Esto sí que es tapear con estilo.
El tour del tapeo
A la espera de conocer los participantes de este año y sus propuestas, podemos empezar con un pequeño tour de tapeo a modo de calentamiento. A la entrada de la ciudad viniendo desde Madrid nos recibe El Pórtico (C/ Avenida Juan Carlos I, 27), un local con una amplísima carta de tapas sencillas y deliciosas que dejan entrever lo que nos espera. Continuamos en Casa Guillermo, un lugar económico, céntrico y con un servicio perfecto. Lo encontramos en una esquina de la plaza del Mercado Chico, repleto de foráneos que saben dónde están las mejores patatas y una carta de vinos a la altura de sus callos. Hablando de patatas, mención especial para las que sirven con dos salsas en El Barbacana, en la plaza de Santa Teresa, 8. Y seguimos con las plazas, porque la de San Nicolás es de parada obligada si queremos probar una de las famosas tartaletas saladas de El Grand Prix, rellenas de jamón, bacon y queso. Eso si andamos de tapeo, pero si el reloj nos da cuartelillo lo mejor es sentarse a disfrutar de la mejor carne asada a la piedra en la chimenea de su salón. Cochinillo, tostón, buey… y no sigo que me pierdo.
Y del centro nos movemos hasta la zona sur para apostarnos en la barra del Mesón Mario (Travesía Cinco Villas, 4) y disfrutar de su jamón recién cortado y sus chipirones a la plancha con alioli. Las cigalas y los langostinos, también a la plancha, los pedimos en La Oca (C/ Rafaela de Antonio, 8) sin olvidarnos de su brocheta de Sepia, su especialidad.
Ya sé que faltan algunos… Pero el verdadero glotón no lo come todo el primer día. La oferta de Ávila para tapear es impresionante y da para rellenar cientos de folios más pero no se trata de escribir un tratado sino de invitaros a descubrir una de las ciudades donde las tapas forman parte de su identidad. Para tapear bien en Ávila no hace falta una guía, basta con tener hambre y ganas de disfrutar.