Cuatro pasos para cuidar tu rostro en primavera
La sequedad del ambiente, un mayor número de horas con luz solar y el aumento de las temperaturas, sumado a los altos niveles de polución de las ciudades hace que nuestra piel se resienta con la llegada de la primavera. Por este motivo, aunque nuestra rutina de limpieza facial parezca la adecuada, es conveniente adecuarla un poco […]
La sequedad del ambiente, un mayor número de horas con luz solar y el aumento de las temperaturas, sumado a los altos niveles de polución de las ciudades hace que nuestra piel se resienta con la llegada de la primavera. Por este motivo, aunque nuestra rutina de limpieza facial parezca la adecuada, es conveniente adecuarla un poco más a esta estación.
Lo primero que hay que hacer es deshacerse de los cosméticos caducados que tengamos por casa. Los expertos consideran que para la primavera, la clave está en usar una crema hidratante ligera de día y una más nutritiva y espesa para la noche.
Te ofrecemos otros 4 trucos que complementarán tu nueva rutina estacional:
1. COSMÉTICOS FORMULADOS A BASE DE AGUA
Las cremas, tanto faciales como corporales, algo más “pesadas” y “densas” son ideales para el invierno, ahora conviene cambiar los cosméticos por otros más ligeros y formulados, principalmente, a base de agua para lograr una textura fina, pero que no deje de hidratar nuestro cutis.
Una buena opción son los formatos en gel o las BB cream para aquellas que prefieran lucir un acabado con efecto “maquillaje” a cualquier hora del día, incluso después del proceso de limpieza.
2. CAMBIAR LOS CABEZALES DEL CEPILLO LIMPIADOR
Si el cepillo limpiador es de este año y su cabezal aún está en condiciones para seguir usándolo, se recomienda cambiarlo de una estación a otra. ¿Por qué? Para evitar la propagación de gérmenes, la suciedad y las bacterias que se acumulan en las cerdas y que causan acné.
3. PROTECTOR SOLAR CONSTANTE
Debería utilizarse durante todo el año, pero con el aumento de las horas de luz con más motivo… La exposición de la piel a los rayos UVA y UVB se irá prolongando y debemos protegernos de ellos con una aplicación diaria de una crema protectora con al menos un SPF 30. Además deberíamos aplicarnos una nueva dosis cada dos o tres horas y cada vez que entremos en contacto con el agua.
4. VITAMINA C PARA LAS DEFENSAS
Durante esta época del año, las alergias pueden ser muy incómodas y también perjudican a la salud de nuestra piel en forma de enrojecimiento, sequedad y erupciones cutáneas. Por este motivo y ya que con muchas de las dietas nutricionales nuestro organismo no consigue el aporte suficiente de vitamina C, la vía tópica mediante un suero se hace necesaria para proteger el tono y la textura de la piel.