Así es la dieta (milagro) de Beyoncé

La cantante está inmersa en un programa de adelgazamiento bastante drástico, de la mano de su amigo, el coach Marco Borges, que sostiene que solo hacen falta 21 días para que el cuerpo acabe con los malos hábitos, en forma de pizzas y patatas fritas, y adopte unos nuevos que nos permitirán ser la envidia de la playa este verano. 

¿En qué consiste este milagro de adelgazamiento? Las premisas básicas son: solo verduras, frutas y semillas, por supuesto nada de huevos, carne, lácteos ni alimentos procesados, mucha agua y 30 minutos de ejercicio al día. El balance es 80% de hidratos de carbono, 10 por ciento de grasas y otro 10 por ciento de proteínas. 

La conversión vegana de Beyoncé 

“Nuestros favoritos de Texas eran el pollo frito, las fajitas, las hamburguesas de barbacoa, los camarones fritos y los sándwiches", ha confesado la cantante acerca de la alimentación que seguían ella y su marido, Jay Z. En invierno de 2013 se convirtieron al veganismo y así la intérprete de Single Lady se ha ido quitando los kilos residuales de los 33 que ganó durante su embarazo.

 Visto el régimen alimenticio de la pareja en el antes, no es de extrañar que por poco que se hayan cuidado, hayan perdido kilos en el después. El problema es que la dieta tiene muchos peros y oculta riesgos como carencias de hierro, proteínas, vitaminas etc. Marco Borges ha creado toda una empresa en torno a sus teorías de adelgazamiento, que se llama “22 días” y que incluye la venta de determinados productos dietéticos. Además, también han sido polémicas otras dietas defendidas por él, como la llamada Master Cleanse, que suponía consumir únicamente una mezcla de agua, limón, pimienta de Cayena y jarabe de arce, que también hizo Beyoncé.

Asociado con Queen B, Borges ha escrito un libro sobre su método de 22 días (en venta únicamente en Estados Unidos), pone a la venta los productos necesarios para elaborar su recetas (humus, pan de almendras o polvos de proteínas vegetales a 35 euros el bote) y el cálculo del coste de seguir su dieta está en 550 euros durante tres semanas. 

El libro del polémico nutricionista está prologado por la mismísima Beyoncé: “Si una tejana como yo puede hacerlo (pasar de la salsa barbacoa y el pollo frito, se entiende), todo el mundo puede”. 

Los riesgos del veganismo

Sin embargo, el principio en el que se apoya Borges para su método y que sostiene que hacen falta 21 días para abandonar un hábito y adoptar otro nuevo no tiene mucho apoyo científico. Investigadores de la University London College hicieron un estudio y se encontraron con un resultado más que aleatorio. Abandonar los panchitos por las semillas de chia puede costar entre 18… y 284 días, según la persona. 

Además, cuando una dieta tiene la cara de un famoso supone el riesgo de ser adoptada por terceras personas, sin la certeza de que les será útil y saludable. “Ya sea el caso de Beyoncé, ya sea el de una persona anónima, las dietas no se pueden compartir -apunta Ata Pouramini, orientador en salud, experto en nutrición por la Oxford Brooks University y quiropráctico-. Las características metabólicas de cada individuo son diferentes, con lo cual los nutrientes son asimilados de distinta forma. Así pues, lo que a unos engorda a otros no”. El experto también subraya que el alto índice en hidratos de carbono de esta dieta puede llevar al sobrepeso a los imitadores. 

Por su parte, el presidente de la Fundación Española de Dietistas-Nutricionistas, Giuseppe Russolillo Femenías, apunta por su parte que la opción vegana por sí sola “es muy saludable siempre y cuando se tomen una serie de complementos de vitaminas como la B12, pero se puede perfectamente ser vegano y vivir muy sano”.