ANTONIO MATRĒS Design convierte una propiedad en los Hamptons en un refugio exclusivo
ANTONIO MATRĒS Design aporta su visión única para transformar una propiedad de los Hamptons en un refugio exclusivo que combina lujo, funcionalidad y confort.
Un nuevo refugio de lujo acaba de nacer en los Hamptons de la mano de ANTONIO MATRĒS Design. Esta joya arquitectónica situada en la tranquila zona de Amagansett ha pasado de ser una propiedad de lujo a un auténtico refugio que redefine el concepto de exclusividad. Diseñada para ofrecer una experiencia única tanto en los meses cálidos como fríos, la residencia se ha convertido en un espacio perfecto para disfrutar durante todo el año, con un ambiente especialmente acogedor para el invierno.
Con este proyecto ANTONIO MATRĒS Design ha transformado una vivienda parcialmente construida en una moderna y lujosa residencia de dos pisos, diseñada para ofrecer una experiencia de retiro y entretenimiento única. Hablamos de una residencia cuya construcción finalizó en 2020 y cuyo espacio ocupa una superficie de 790 metros cuadrados. Una extensa área cuyo centro es la piscina, que se posiciona como el centro de vida social y de ocio de la residencia.
Todo está diseñado para el lujo en este refugio. Al entrar, los visitantes son recibidos por un imponente vestíbulo de doble altura, que conecta de manera fluida con el resto de la casa, siendo la carta de presentación de esta sofisticada construcción. La casa cuenta con cinco habitaciones suite, tres de ellas destinadas para los propietarios y dos para los invitados. Cada una de estas habitaciones está equipada con baños privados, garantizando un alto nivel de privacidad y comodidad. Destaca la habitación principal, de 32 metros cuadrados, acompañada de un pasillo de 19 metros cuadrados que alberga vestidores amplios y funcionales. Además, una terraza exterior de 6 metros cuadrados completa la habitación.
En el corazón de esta propiedad de lujo, se encuentran cuatro cocinas pensadas para adaptarse a diversas necesidades. Además, cuenta con dos cocinas exteriores estratégicamente ubicadas para aprovechar al máximo el entorno natural: una junto a la piscina, permitiendo a los residentes y sus invitados disfrutar de deliciosas cenas al aire libre, mientras que la otra se encuentra en la azotea, ofreciendo una vista inigualable. En el interior la casa incluye dos cocinas adicionales: una ubicada en el área principal, ideal para el día a día, y otra situada en la zona de ocio del sótano.
Esta exclusiva propiedad fusiona elementos antiguos con la modernidad de manera única. Un ejemplo es el cabecero de la cama en la habitación principal, una impresionante pieza de antigüedad persa que data de más de 300 años. También cuenta con una chimenea corrida en el comedor, una pieza arquitectónica destacada por su singularidad. Con una longitud de casi 7 metros y ubicada a una altura inusual, esta chimenea no solo es un elemento de diseño espectacular, sino que también cumple una función esencial en el hogar.