Hermès refuerza su presencia en Francia con una nueva marroquinería en las Árdenas.

Hermès refuerza su presencia en Francia con una nueva marroquinería en las Árdenas

La maison francesa Hermès coloca la primera piedra de su vigésimo sexta planta de marroquinería en Charleville-Mézières. El proyecto generará 250 empleos y promueve tanto el saber hacer artesanal como la regeneración urbana.

Hermès ha anunciado el inicio de las obras de una nueva planta de marroquinería en Charleville-Mézières (Árdenas), prevista para abrir en 2027. Esta nueva instalación, la número 26 dedicada a la marroquinería, ofrecerá empleo a 250 artesanos especializados en la creación de bolsos y artículos de cuero. Con esta apertura, la firma reafirma su compromiso con la producción local, el empleo de calidad y la transmisión de oficios artesanales.

La futura marroquinería se suma a las otras dos sedes que la maison ya tiene en la región —Bogny-sur-Meuse (2004) y La Sormonne (2023)—, consolidando así un polo de savoir-faire en torno a la École Hermès des savoir-faire, también ubicada en Charleville-Mézières. Esta escuela interna forma a los nuevos artesanos y supervisa los programas de cualificación profesional en colaboración con la agencia France Travail.

El emplazamiento elegido es el antiguo sitio industrial de Deville, un lugar emblemático para la ciudad. Hermès lo transformará respetando su patrimonio arquitectónico e integrando criterios de sostenibilidad. Diseñado por el estudio Coldefy & Associés, el complejo tendrá una superficie total de 5.800 m² y combinará edificios históricos con nuevas instalaciones para talleres, oficinas y zonas comunes.

El proyecto apuesta por materiales de bajo impacto ambiental —como entramado de madera, paja y revoques naturales—, una orientación que aprovecha la luz natural, y una red de calefacción urbana alimentada por energías renovables. Además, contará con 1.400 m² de paneles solares y buscará la certificación medioambiental E4C2.

En línea con su compromiso ecológico, Hermès llevará a cabo una ambiciosa intervención paisajística que reconvertirá el entorno industrial actual en un espacio verde. Más de 8.000 m² del terreno serán permeables al agua y se plantarán especies autóctonas para recuperar la vegetación ribereña a lo largo del Mosa, fomentando la biodiversidad y mejorando la calidad ambiental del área.

Con esta iniciativa, Hermès no solo refuerza su capacidad productiva en Francia, sino que también impulsa la revitalización social, económica y ecológica de las Árdenas. A día de hoy, todos los talleres de marroquinería de la maison están situados en territorio francés, y se encuentran en marcha tres nuevas aperturas en Charente, Gironda y Normandía.

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