Bvlgari redefine los límites con el nuevo Octo Finissimo Ultra Tourbillon

Bvlgari debutaba en Watches & Wonders y no defraudó al presentar un nuevo récord de delgadez con el Octo Finissimo Ultra Tourbillon, décimo récord al integrar un tourbillon esqueleto en el movimiento de un reloj con un grosor total de 1,85 mm de alto. El tourbillon ocupa un lugar especial en Bvlgari: fue el Octo Finissimo Tourbillon el que lanzó esa apuesta por la delgadez en 2014, poniendo en marcha una década que ha conducido a diez récords mundiales y más de 60 premios internacionales, incluido el Grand Prix d’Horlogerie de Genève (GPHG).

Además, en esta pieza Bvlgari ha llevado la esqueletización a otro nivel, creando contrastes con técnicas decorativas contemporáneas: la pendiente pulida de la brida del bisel, el equilibrio del tourbillon rodiado y los bloques de inercia, y el puente del tourbillon rodiado con acabado sunburst. El nuevo Octo Finissimo Ultra Tourbillon consigue todo esto en una caja de 40 mm de diámetro y está impulsado por el calibre BVF 900. Mecánico de cuerda manual, late a 28.800 vibraciones por hora (4 Hz) y ofrece una reserva de marcha de 42 horas.

El sello distintivo de esta nueva creación es su platina principal de carburo de tungsteno que alberga el movimiento mecánico. Además, presenta un bisel, un centro de caja y asas elaborados en titanio microgranallado. Las dos ‘coronas’ planas, cada una sobresaliendo ligeramente del lado de la caja, a la izquierda (8 en punto) para dar cuerda al mecanismo y a la derecha (3 en punto) para ajustar la hora, están hechas de acero y graneado circular; asimismo, el trinquete, adornado con decoraciones geométricas grabadas, está hecho de acero graneado circular. Para una legibilidad óptima, la esfera de las horas cuenta con agujas de horas y minutos rodiadas con un revestimiento de antracita DLC. Complementando a la perfección el reloj, el brazalete integrado de titanio microgranallado refleja su estética ultradelgada, midiendo solo 1,5 mm de grosor, incluido el cierre plegable.

Este proyecto implicó la revisión de los fundamentos tradicionales para diseñar un reloj en dos dimensiones en lugar de tres. Para superar el desafío, los equipos de I+D de Bvlgari crearon nuevos procesos y técnicas, asegurando ocho patentes específicas que cubren innovaciones como la pantalla diferencial, el diseño integrado del centro de la caja y la placa, el fondo de la caja bimaterial, un nuevo método de montaje de cristal, una nueva estructura de barril, el módulo oscilador, la construcción modular y el diseño del brazalete.