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El sorprendente efecto polvo de diamante del nuevo reloj de Audemars Piguet

Audemars Piguet presenta dos nuevas versiones de su modelo Royal Oak Frosted Gold Automático en las que destaca el curioso efecto de su esfera.

Un fascinante juego de luces y texturas es lo que propone Audemars Piguet con sus nuevas referencias, una en oro blanco y otra en oro amarillo de 18 quilates. La firma de origen suizo acaba de presentar estas dos versiones del modelo Royal Oak Frosted Gold Automático de pulsera de 34 mm que incluyen el Calibre 5800, movimiento de 4 mm de grosor que late a una frecuencia de 4 Hz y tiene una reserva de marcha de 50 horas conmecanismo visible a través del fondo de cristal de zafiro.

Lo que llama la atención especialmente de este reloj es el efecto polvo de diamante del que presume que ha sido bautizado desde la manufactura como "Frosted gold", una antigua técnica en la que se cincelan minúsculas hendiduras en la superficie del oro utilizando una herramienta con punta de diamante para darle un grano especial que refleja la luz de manera sorprendente.

Este método artesanal ha sido adaptado desde Audemars Piguet después de haber sido reinterpretado por la joyera Carolina Bucci en 2016 con motivo del 40 aniversario de la versión femenina del reloj Royal Oak.

Royal Oak Frosted Gold Automático en oro amarillo.

Este acabado de lujo contrasta con las superficies pulidas y satinadas del reloj al tiempo que los cantos facetados resaltan su bisel octogonal, mientras que el satinado de los flancos del brazalete y la caja aporta profundidad, textura y luz al conjunto.

A este hipnótico efecto es al que desde el departamento de diseño de Audemars Piguet han querido unir una esfera texturizada que han llamado "Crystal Sand" y complementa la superficie martillada de la caja y el brazalete.

El motivo grabado se concibe a partir del perfil de un cristal de rutenio auténtico y el molde de estampado ha sido construido átomo por átomo mediante un proceso de deposición de metal conocido como electroformado.

Royal Oak Frosted Gold Automático en oro blanco.

Tanto en la versión de oro amarillo como en la de oro blanco, el aspecto monocromático del reloj se logra mediante baño galvánico, realizado con revestimiento rodiado o dorado en función del modelo, lo cual potencia aún más su luminosidad.

El logo de la firma aparece en el mismo tono del modelo elegido en relieve debajo del doble índice a la altura de las 12 horas. La animación de oro blanco se orna con índices y agujas de oro rosa de 18 quilates con acabado luminiscente, mientras que en el modelo de oro amarillo los tonos cálidos del reloj contrastan con los índices y las agujas de oro blanco de 18 quilates pulido.

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