El reloj de bolsillo más revolucionario lleva el sello del artista Daniel Arsham
De la mano de Hublot, el artista Daniel Arsham ha reinventado el clásico reloj de bolsillo añadiéndole un toque futurista.
Quien crea que el reloj de bolsillo ha muerto está muy equivocado. Y no lo decimos solo porque hace unas semanas uno de los actores del momento, Barry Keoghan, para la gala del MET basó su look en uno de los años 30 de estilo art decó; sino porque también es posible traer piezas clásicas como esta a la actualidad y darles la vuelta de tal forma que no parezcan en absoluto retro.
Es el caso de la nueva joya que acaba de presentar Hublot de la mano del artista contemporáneo Daniel Arsham. El estadounidense, a quien se le conoce porque con sus obras trata de mostrar la maleabilidad y el poder de la nostalgia mezclando arte, diseño y cultura popular; ha querido unirse al sello suizo para reinventar el reloj de bolsillo de una manera sorprendente y desafiar así las reglas de lo que siempre se ha entendido por este tipo de piezas.
Para empezar no es redondo como suele ser frecuente sino que se caracteriza por una original forma de lágrima mucho más orgánica y fluida que mide 73,2 mm de largo, 52,6 mm de ancho y 22,5 mm de grosor para así ser ergonómico y adaptable a cualquier mano.
Además, gracias a su confección con dos cadenas de titanio –cada una de ellas con el sistema One Click doble patentado por Hublot que ayuda a que se pueda fijar fácilmente–, puede llevarse tanto como reloj de bolsillo tradicional como colgado del cuello e incluso gracias a su pedestal de titanio y cristal mineral permite que se utilice como elemento decorativo apoyado sobre una mesa.
Arsham Droplet es el nombre que recibe este singular reloj que, según Daniel Arsham, "aúna pasado, presente y futuro" y que es una auténtica joya de coleccionista de edición limitada de la que solo hay disponibles 99 ejemplares en todo el mundo.
Cuenta con movimiento de desarrollo interno Meca-10 de Hublot, lo que implica reserva de marcha de 10 días que garantiza el uso del reloj durante períodos prolongados de tiempo sin necesidad de darle cuerda con frecuencia.
La caja es de titanio y lleva el mecanismo visible gracias a los dos cristales colocados en estructura de sándwich que se asemejan a un delicado encaje tejido con un patrón a modo de gota. Utiliza un sistema de doble sellado con 17 juntas tóricas ingeniosamente colocadas para garantizar un sellado perfecto y se complementa con los amortiguadores laterales de caucho de color verde que llevan la firma de Daniel Arsham estampado sobre su superficie. También luce elementos emblemáticos de la manufactura suiza como sus característicos seis tornillos en forma de H.
"Este revolucionario reloj es una auténtica obra de arte que combina a la perfección nuestra maestría relojera con la preclara visión artística de Daniel Arsham", afirma el CEO de Hublot, Ricardo Guadalupe, sobre este reloj con gran trabajo artesanal al que el artista estadounidense ha sabido aportar su visión creativa hasta convertirlo en lo que a él le gusta llamar una "reliquia del futuro".