Alejandro Bataller celebra diez años de SHA Wellness Clinic
Hacer felices a 50.000 personas no es sencillo. Conseguirlo tan solo en diez años tampoco. Pero la familia Bataller sigue aumentando esa cifra. Su empresa, SHA Wellness Clinic, es líder en el sector del bienestar en España, acogiendo en sus instalaciones de Altea (Alicante) a jefes de gobierno, familias reales, estrellas de Hollywood y personas […]
Hacer felices a 50.000 personas no es sencillo. Conseguirlo tan solo en diez años tampoco. Pero la familia Bataller sigue aumentando esa cifra. Su empresa, SHA Wellness Clinic, es líder en el sector del bienestar en España, acogiendo en sus instalaciones de Altea (Alicante) a jefes de gobierno, familias reales, estrellas de Hollywood y personas anónimas que buscan esa pausa para encontrar en el cuidado de la salud sus mejores vacaciones. Alejandro Bataller (Argentina, 1982) es el vicepresidente de esta compañía con 300 trabajadores que iniciaron su padre Alfredo y su madre Graciela en 2008; que acumula más de 50 premios y distinciones honoríficas internacionales y que el pasado año creció un 14%.
Decía Aristóteles que “lo que con mucho trabajo se adquiere, más se ama”. Una máxima que cumple su familia.
El valor del esfuerzo, de que nada es gratis, el cuidado de los costes y la búsqueda de la excelencia es algo que mi padre siempre nos ha transmitido, y nosotros hacemos lo mismo con las personas que trabajan en SHA Wellness Clinic. Ahora la familia está formada por más de 300 miembros, que es nuestra empresa. La excelencia no es un acto, sino un hábito y, como tal, es la suma de nuestra acciones diarias. Muchas veces, la única manera de ser feliz es dedicarse a lo que te gusta y disfrutar con ello.
Compartir el trabajo con la familia no siempre es sencillo. ¿En su caso funciona?
Trabajar en familia es un reto, pero también una gran oportunidad. SHA Wellness Clinic es un proyecto que requiere coordinación, tenacidad y esfuerzo que pocos equipos directivos, que no fueran familiares, podrían hacer con esa permanencia en el tiempo. Trabajan mis padres, que son el alma del proyecto, y mi hermano Alfredo, que ha asumido la mayor carga operativa.¿Cómo consiguió hacer crecer un negocio que comenzó en plena crisis económica?
No hay una clave mágica, son un conjunto de enseñanzas que hemos ido adquiriendo. Abrimos en 2008 en medio de la peor crisis económica, y fue como aprender a nadar en un tsunami. El tesón de la familia, un concepto ganador que respondía a unas necesidades y el hecho de haber conseguido una cultura corporativa muy fuerte han resultado exitosos.
Por su décimo aniversario inauguran un nuevo concepto, SHA Residences.
Es un conjunto de 11 residencias privadas que construimos con criterios sostenibles, donde se ha priorizado la salud y el bienestar en el diseño. Te permiten disfrutar con mayor amplitud y comodidad de la experiencia de SHA Wellness Clinic, pues son realmente viviendas de entre 300 y 500 metros cuadrados, con piscina, jardín y terraza. Algunas tienen spa privado, otras sala de fitness o, incluso, sala de cine.