Nombres del año IV – Canto clásico: Paloma Gutiérrez del Arroyo y el legado de ‘Olvidadas’

Existen experiencias musicales que se resisten al olvido. Sea por la calidad, por la excelencia interpretativa o por razones ligadas a una carga emocional. Me viene a la memoria la seductora cantante medievalista Paloma Gutiérrez del Arroyo, fundadora y profesora de la Escuela de Música Medieval y de Tradición Oral de la Institución Libre de Enseñanza, capaz de arrebatar al oyente cuando interpreta canciones del trovador del siglo XII Bernart de Ventadorn, acompañada al arpa medieval por Manuel Vilas, o transmitir la alegría de las cantigas del siglo XIII o canciones tradicionales de las más diversas procedencias para conmemorar las fiestas del año con el formidable cuarteto vocal femenino Cantaderas, al lado de Anne Marie Lablaude-Vellard, Ana Arnaz de Hoyos y June Telletxea.

Precisamente con este grupo llenaron de entusiasmo el pasado 24 de mayo una abarrotada Institución Libre de Enseñanza presentando el disco Olvidadas en recuerdo de las mujeres españolas deportadas al campo de concentración nazi de Ravensbrück, entre 1942 y 1945 –se estima que al menos 400 entre más de 120.000 de 30 países–. Olvidadas surgió de un encargo del festival de música Kulturfest im Land Brandenburg al grupo Cantaderas. Tras varios meses de investigación, el 23 de septiembre de 2023 se celebró un concierto en la fábrica textil intramuros del campo, y en el mismo lugar se grabó un año después el disco.

La grabación es una mezcla de música tradicional y antigua, con los cantos que acompañaron a las deportadas y otros que inspiraron su vida y recuerdos. También hay una obra reciente, estrenada en 2023, un Romance del conde Niño, de Dominique Vellard, tan ligado al extraordinario Ensemble Gilles Binchois. El consuelo está garantizado.