El futbolista Rodri Hernández con el Balón de Oro.

Nombres del año V: Rodri Hernández, el futbolista tranquilo

Representando al deporte en nuestra sección de nombres del año no podía faltar Rodri Hernández. El Balón de Oro corona a este jugador que, mientras cataliza el juego de la selección y del Manchester City, sobrevuela el ruido mediático repartiendo lecciones de equilibrio y juego limpio.

El primer futbolista con una carrera universitaria en ganar el Balón de Oro es también el segundo español en lograr el trofeo individual más importante del mundo en categoría masculina. 64 años después del nunca bien ponderado premio a Don Luis Suárez Miramontes, junto a los cuatro Balones de Oro (dos para cada una) de Alexia Putellas y Aitana Bonmatí, ha llegado a esta lista Rodrigo Hernández Cascante (Madrid, 1996), Rodri para todos, un chaval de una urbanización de Villanueva de la Cañada que, tras su paso por la cantera del Atlético de Madrid, partió con 17 años hacia Villarreal para completar su formación futbolística y también académica.

El líder de la selección española campeona de Europa, el catalizador del juego de La Roja y del Manchester City desde hace seis temporadas, es un flamante licenciado en Dirección y Administración de Empresas por la Universidad Jaume I de Castellón, que ha entendido siempre que la formación integral le ayudaría también en su carrera como futbolista. Una carrera que también tuvo decepciones, como su salida del Atlético, a donde regresó tras descollar en el Submarino Amarillo. Su traumática salida al club inglés de Guardiola, con el aparente de-sinterés de Simeone, fue una herida que su juego se encargó de suturar. Como hará también con la grave lesión de rodilla que sufrió al inicio de la temporada 2024/25.

Otra forma de sabiduría futbolística es posible. Clave en el triunfo de los citizens en la Champions League de hace dos años (marcó el gol de la victoria y ya mereció el Balón de Oro) y en los títulos de la Premier Legue que ha ganado en este sexenio exitoso, Rodri ha aportado una imagen de sosiego y de responsabilidad incluso entre el ruido mediático frente a los defensores de la candidatura de Vinicius al prestigioso premio de L’Équipe.

Con orígenes familiares en La Bañeza (León), este joven de familia acomodada (hijo de ingeniero y directora de marketing) se ha convertido en el futbolista tranquilo. El joven jugador que nunca abandonó las aulas, y que siempre ha destacado el apoyo vital de su pareja, Laura Cascante, médica, es ahora el que, convertido en el mejor centrocampista del momento, reparte lecciones de equilibrio y de fair play por todo el mundo.

ETIQUETAS:
  • Deporte
  • Fútbol
  • Rodri Hernández