Todo lo que no sabía de Woody Allen

¿Por qué decidió escribir sobre la vida de Woody Allen? Porque admiro mucho su trabajo y me fascina que haya sido tan prolífico, de manera independiente, durante cerca de 50 años, su incansable inventiva y productividad. También me sorprenden sus otras facetas: la de escritor, cómico, showman, guionista de televisión… Y por último creo que Allen ha desempeñado un papel clave en la redifinición de la masculinidad y en las relaciones entre hombres y mujeres. Fue el primer cineasta en ofrecer una visión de los hombres como seres vulnerables e inseguros tanto en sus sentimientos sexuales como emocionales. Era algo nuevo que contrastaba con la tradición de John Wayne o Gary Cooper de tíos guapos, súper masculinos, indomables, poderosos y confiados. ¿Qué ha sido lo más difícil al enfrentarse a su trayectoria? Sin duda rastrear las acusaciones que Mia Farrow vertió sobre los abusos infantiles de Woody Allen. ¿Cómo fue su infancia? Para ser un niño judío que creció en Brooklyn, bastante normal. Le encantaba la magia, los deportes, y el jazz de Nueva Orleans. Eso sí, odiaba la escuela y todo lo que supurara autoridad… nunca fue entendido por sus padres. Su madre era judía ortodoxa. Su padre trabajó como gorila de portería y camarero en el Sammy’s Bowery Follies, un bar salvaje en el Bowery neoyorquino, e incluso antes fue un informador del mafioso Albert Anastasia. Los momentos más difíciles en esta época ocurrieron cuando su madre (que a menudo le golpeaba) trató de persuadirlo para que se convirtiera en farmacéutico… a sus 97 años todavía llamaba a los amigos de Allen para que le convencieran de que dejara el negocio del cine y se hiciera farmacéutico. ¿Cree que mucha gente odia a Woody Allen como persona? Unos pocos le odian, sí, pero muchos más, en todo el mundo, se identifican con ese hombrecito que triunfa sobre sus temores e inseguridades, tanto hombres como mujeres. ¿Qué instantes, experiencias, han marcado su vida? Pues, al principio de su vida, lograr superar los sentimientos negativos que él mismo tenía de su apariencia física y años de rechazo por parte de las niñas. También luchó intensamente para convertirse en un cómico independiente a pesar de su carácter tímido, introspectivo y depresivo. Sufrió y luchó durante años para ganar autoestima en el escenario. ¿Por qué esa cierta obsesión hacia las chicas jóvenes? ¿Qué significa, representan para él? No creo que tenga una obsesión particular con las mujeres jóvenes. Lo que sí ha sido es audaz al hablar abiertamente de ellas… si miramos a nuestro alrededor vemos a hombres mayores con jovencitas en todos los sectores de la sociedad. Ellas simbolizan para Allen una especie de inocencia, de honestidad y pureza. En Manhattan, por ejemplo, que es la película más citada cuando se habla de esas inclinaciones del director, la relación entre Isaac y Tracy no es al estilo 'lolita', sino que representa una atracción entre espíritus afines… no veo la película como intensamente sexual en absoluto. ¿Y esa obsesión por el sexo? ¿Quién no está obsesionado por el sexo? Woody Allen, simplemente, se atreve a sacarlo a la luz. ¿Qué piensa Woody Allen del amor? Creo que él es muy romántico, y que eso se refleja permanentemente en sus películas. Piense en la escena de Kenneth Branagh y Winona Ryder en Hudson Square en Celebrity, o cuando Woody Allen y Mia Farrow se reúnen bajo la lluvia al final de Broadway Danny Rose, por poner dos ejemplos. ¿Y su moral? Tiene un moral muy recta en sus relaciones personales y en su trabajo. Es leal y honesto. No piensa en ganar dinero, que sí, pero sobre todo persigue hacer películas de calidad y en mantener su independencia artística. Vamos a sus relaciones personales… ¿Cómo son con Mia Farrow? Estaban muy enamorados cuando se conocieron, y sus primeros años juntos fueron muy románticos y vibrantes. Él utilizó el talento de Farrow en muchas de sus películas, que no habían sido descubiertos por nadie previamente. Quizás la relación empezó a flaquear cuando ella decidió adoptar tantos niños. Era evidente que casi cinco años antes de que acabaran separándose ya no tenían relaciones sexuales. Y, por supuesto, la relación se rompió irremediablemente cuando Farrow descubrió las fotos desnudas de Soon-Yi. ¿Y con Soon-Yi? Tras 22 años de matrimonio, mantienen una relación excelente. Ella trabaja con personas discapacitadas y es muy inteligente. Puedes ver a la pareja paseando tranquilamente, tomados de la mano, por todo Nueva York. ¿Y con su hijo Dylan? Él vive muy apegado a su madre, Mia Farrow y alberga cierta hostilidad hacia Allen. Evidentemente Woody era un amoroso padre, pero esa relación se resquebrajó por las acusaciones de Mia contra Allen. En los últimos años, el director mantiene una muy buena relación con uno de sus hijos adoptivos, Moisés, y eso a pesar de que no se llevaban muy bien al principio. Para terminar: todas esas acusaciones… hasta qué punto han afectado a Woody Allen? Creo que la continua e implacable campaña de Mia contra él le ha afectado, sí, pero no le ha destruido. Hay quienes creen en esas acusaciones y son muy hostiles, pero la realidad es que cuando hace una buena película, casi todo el mundo le admira. Indudablemente se ha visto empañada su vida pública, claro, pero sigue siendo muy popular y sus películas tienen más éxito que nunca.