Colección Marine de Breguet: la distinción en el mar

Colección Marine de Breguet: la distinción en el mar

Cuando se analizan las contribuciones relojeras de Abraham-Louis Breguet, la lista resultante es tan imponente como necesaria para comprender la evolución de la relojería y su historia. Breguet, símbolo en su máxima expresión de la genialidad, poseía una mente abierta, inquieta y privilegiada, que dejó innovaciones de todo tipo, demostrando que nada se le resistía. […]

Cuando se analizan las contribuciones relojeras de Abraham-Louis Breguet, la lista resultante es tan imponente como necesaria para comprender la evolución de la relojería y su historia. Breguet, símbolo en su máxima expresión de la genialidad, poseía una mente abierta, inquieta y privilegiada, que dejó innovaciones de todo tipo, demostrando que nada se le resistía. Ricardo Balbontín Uno de los territorios en los que actuó su mente preclara es el de los cronómetros de marina, una disciplina en la que algunos de los nombres ilustres de la relojería dejaron su impronta y donde, por supuesto, no podía faltar la figura de Breguet. Tanto como para que entre los numerosos honores que Breguet recibió a lo largo de su vida, obtuviera tal vez el más importante, el de Relojero de la Marina por su contribución a mejorar la precisión en la medición de la longitud, tan necesaria para la navegación de la época. De hecho, con este nombramiento, la actividad del relojero se concentró durante un tiempo en asuntos de Estado más que en satisfacer los múltiples encargos que recibía, fruto de su merecida fama. Obviamente, el Breguet moderno (el que representa la marca) no podía dejar fuera esta temática. Presente en la colección de la firma desde el año 1990, esa historia conjunta de la Marina y la relojería comenzó de forma modesta, compuesta por solo por dos modelos de carga automática declinados en otros tantos diámetros. Eso sí, ya garantizaban una hermeticidad de 100 metros, una de las características distintivas de la colección. Unos años después, llegaría el momento de afrontar las complicaciones, que se iniciaron con la aparición de un cronógrafo tri-compax y un Hora Mundi de hora universal. Aunque para los seguidores de la línea Marine de Breguet hay una fecha señalada, la de 2005, cuando adquiere una estética mucho más deportiva. Esa apuesta se caracterizaba por una líneas mucho más rotundas en la caja y, sobre todo, por los protectores de corona. La referencia 5817 con segundero central y la primera visualización de la fecha de grandes dimensiones, se convirtió en el modelo que rompía moldes además de incorporar otros elementos innovadores, como la correa de caucho, y la opción de optar por la caja de acero, una primicia en la línea. Breguet, al igual que hacía su fundador, no ceja nunca en su afán de mostrar su conocimiento relojero con creaciones que destaquen por su calidad. Por eso, en la colección Marine también ha habido espacio para un Cronógrafo Tourbillon (referencia 5837). Y siguiendo esa misma línea de superación, llegamos hasta el año 2017, cuando la colección Marine presentaba otra obra maestra relojera: la Équation Marchante, que se muestra en una imponente caja de 43,9 mm. Este modelo es el punto de partida y el símbolo de una nueva generación de relojes Marine que se distinguen por su imagen moderna y dinámica.Este año, el camino iniciado en el rediseño de la colección ha dado un paso más con la llegada de tres nuevas creaciones, que por primera vez en la línea Marine, ofrecen la posibilidad de ser declinadas en titanio. Las tres creaciones están referidas a un tres agujas con ventana para la fecha (referencia 5517), un cronógrafo (referencia 5527), y el Marine Alarme Musicale (referencia 5547), una experiencia mecánica a la que Breguet no es ajeno y tampoco su línea marinera. Todos ellos comparten el mismo diámetro de caja (40 mm) y en su interior están impulsados por diferentes calibres de carga automática.

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  • Alta Relojería