
Gastronomía y carretera: viaje a Casa Marcial a bordo del Hyundai Santa Fe Hybrid
Viajamos hasta el restaurante Casa Marcial, flamante tres estrellas Michelin, al volante del nuevo Hyundai Santa Fe hybrid, un imponente y todopoderoso SUV con capacidad para siete adultos.
Dicen en Hyundai que el SUV Santa Fe ofrece “el equilibrio perfecto entre la vida en la ciudad y al aire libre”. También, añadiríamos nosotros, entre el ocio y el trabajo. El viaje que emprendemos para constatarlo es una prueba de ello: 500 kilómetros, en unas cinco horas, entre Madrid y Arriondas, la pequeña localidad asturiana que Casa Marcial ha colocado en el mapa gastronómico global tras lograr, hace apenas unos meses, su tercera estrella Michelin. Necesitamos, por tanto, un vehículo a la altura de tanta excelencia, y el Santa Fe con motorización híbrida es el elegido.
El equipo Gentleman viaja pertrechado de no poco equipaje: además del personal de cada uno de sus componentes, el profesional necesario para la elaboración del reportaje, material fotográfico y ordenadores incluidos. Vaya por delante que el espacio no es un problema en el Hyundai Santa Fe. Se trata de un imponente SUV con capacidad para siete adultos que, con las tres filas de asientos en uso, mantiene un maletero de 250 litros de capacidad, pero que, con la tercera fila abatida, llega hasta los 628. Mucho más que suficiente. Uno de los viajeros comenta que un conocido, especialmente aficionado a las escapadas campestres, instala a veces una pequeña tienda en su techo para las aventuras en familia.

Desde el primer momento, viajamos con la convicción de no pasar desapercibidos: con una longitud de 4,78 metros –seis centímetros más que la generación anterior del mismo modelo–, este nuevo Santa Fe de líneas limpias y atrevido diseño transmite una imagen poderosa y robusta que, según comprobamos tanto en la ciudad como cuando nos adentramos en zonas rurales, se adapta por igual a entornos urbanos y naturales. También, por supuesto, a la conducción en autovía, gracias a las mejoras introducidas para incrementar su rendimiento aerodinámico, impensable en un vehículo de estas características.
En el interior, en un acabado sin duda lujoso –por la noche tendremos oportunidad de comprobar la posibilidad de cambiar la iluminación de la cabina– destaca la doble pantalla panorámica, que dedica 12,3 pulgadas tanto al panel de instrumentos como al sistema de información y entretenimiento. La visibilidad y manejabilidad es inmejorable. Los viajeros de los asientos traseros disfrutan de un espacio aún más ampliado para las piernas y también en altura acomodados en unos asientos con memoria para guardar la posición elegida.

Una preocupación menos
Respeto a la motorización, la versión en la que viajamos, la híbrida autorrecargable, combina un motor de gasolina de 1.6 litros T-GDI de 160 CV con otro eléctrico para alcanzar una potencia de 215 CV. La versión híbrida enchufable combina el mismo motor de gasolina con dos eléctricos que elevan la potencia hasta los 265 CV. Ambas opciones cuentan con tracción a las cuatro ruedas y cambio automático de seis velocidades. Además, si la primera recibe la etiqueta ECO, la segunda cuenta con el distintivo CERO, con las ventajas de movilidad que ambas conllevan y que nos han ahorrado preocupaciones al respecto desde el inicio.
Durante la conducción, la sensación de tranquilidad que transmiten las dimensiones del vehículo se ve incrementada por la certeza de viajar acompañados de sistemas de seguridad de última generación que incluyen –además de un conjunto de 10 airbags– una carrocería reforzada, monitor de visión periférica, retrovisor digital y asistente contra colisiones traseras entre otras muchas prestaciones que sitúan su capacidad de conducción autónoma en el Nivel 2. La llegada al destino nos sorprende descansados y dispuestos para seguir disfrutando.