Grassy: medio siglo de experiencias
Cuando uno comienza a caminar por la Gran Vía Madrileña descubre brillante el logotipo de la firma relojera Rolex. Unos metros más abajo, en el número 1 se halla la Joyería Grassy, uno de los espacios más emblemáticos de la alta relojería y joyería de la ciudad, que ‘recibe’ al caminante con una singular rotonda […]
Cuando uno comienza a caminar por la Gran Vía Madrileña descubre brillante el logotipo de la firma relojera Rolex. Unos metros más abajo, en el número 1 se halla la Joyería Grassy, uno de los espacios más emblemáticos de la alta relojería y joyería de la ciudad, que ‘recibe’ al caminante con una singular rotonda desde cuyas vitrinas se muestra todo el espectáculo de la firma relojera suiza. Hoy, ese espacio dedicado a Rolex ha sido renovado atendiendo a un hecho mayor, de los de calado; y es que la relación entre ambas firmas cumple nada menos que 50 años de vida.
Una celebración que toma vida en su interior en forma de un espacio renovado atendiendo a la nueva imagen de los espacios de la compañía relojera, que prosigue a través de una exposición conmemorativa y de la edición especial de 50 modelos Explorer y otros diez Cellini que lucen el grabado de esta unión tan especial en el fondo del reloj.
La exposición, que responde al nombre de ’50 ventanas para una historia’ se convierte en un recorrido por la trayectoria creativa de Rolex y en concreto desde que comenzara esta relación con Grassy en 1967. Son 50 piezas míticas que se han registrado durante estos años, recopiladas por el joyero, que representan la historia viva del crecimiento de uno y otro en la alta relojería; de una relación que el tiempo ha convertido en una sólida y permanente evolución; consolidada en algo más que un acuerdo comercial.