‘Navitimer’ de Breitling, el icono relojero que evoluciona fiel a sus raíces
Cuando se habla de relojes instrumento, es inevitable mencionar el Navitimer de Breiting. Este año celebra su aniversario, 70 años, pero sigue en plena forma, con esa regla de cálculo que ilustra la esfera y su funcionalidad. Pero sobre todo cuenta con un carisma especial, ese que le ha llevado a alcanzar el título de […]
Cuando se habla de relojes instrumento, es inevitable mencionar el Navitimer de Breiting. Este año celebra su aniversario, 70 años, pero sigue en plena forma, con esa regla de cálculo que ilustra la esfera y su funcionalidad. Pero sobre todo cuenta con un carisma especial, ese que le ha llevado a alcanzar el título de leyenda. Hoy, Breitling lanza una nueva colección Navitimer rediseñada donde se apuesta por los colores vivos, por un diseño mejorado con toques contemporáneos y una invitación a viajes increíbles. Durante 70 años, el reloj de piloto de Breitling ha sido considerado el más emblemático de cuantos ha producido la marca.
En este nuevo Navitimer, Breitling mantiene los aspectos reconocibles de los códigos de diseño que lo distinguen, y que no son otros que la regla de cálculo circular, los índices de bastón, el trío de contadores del cronógrafo y el bisel con muescas. Pero al analizarlo con detalle, hay unos refinados toques que lo modernizan. Por ejemplo, la regla de cálculo se ha aplanado y, junto con el cristal abombado, se crea la ilusión de un perfil más compacto. Además, la alternancia de acabados pulidos y cepillados confiere un toque de calidad sin perder su discreción. Una silueta más fina de la masa oscilante realza la visión del Calibre 01 Breitling con certificado de cronómetro COSC. Este movimiento cuenta con una garantía de cinco años y proporciona 70 horas de reserva de marcha, además de permitir cambiar la fecha en cualquier momento.
El reloj está disponible en tres tamaños (46, 43 o 41 mm), dos materiales de caja (acero u oro rojo) y dos tipos de pulsera (aligátor semibrillante o brazalete metálico). Por lo que respecta a la esfera, además de los tradicionales, se declina en colores azules, verdes o cobrizos, que le dan ese toque contemporáneo definitivo.