Los platos de Estrella Michelin que podrán comer los atletas de los Juegos Olímpicos en cualquier momento del día
El restaurante de la Villa Olímpica será durante unas semanas el más grande del planeta y en él se servirá cocina principalmente vegetariana a cargo de un chef Estrella Michelin.
Faltan apenas unas horas para que de comienzo la edición 2024 de los Juegos Olímpicos. París ya tiene todo listo para acoger las diferentes competiciones deportivas que se sucederán en las próximas semanas, después de haber puesto mucho empeño en cuidar hasta el último detalle.
Las principales empresas de Francia se han volcado de cara a esta importante cita y por eso sabemos, por ejemplo, que el grupo LVMH, entre otras cosas, se ha encargado tanto de la creación de las medallas que lucirán los atletas que alcancen pódium como de los uniformes que llevarán los voluntarios.
También otros nombres propios del país están deseando estar presentes en los JJOO. Es el caso del cocinero Akrame Benallal, a quien se le ha encargado la tarea de elaborar varios platos exclusivos para que los deportistas puedan probarlos en el restaurante de la Villa Olímpica que estará abierto 24 horas al día y servirá 40.000 comidas cada jornada de acuerdo a la cultura y necesidades dietéticas de cada deportista.
Akrame Benallal, quien posee una estrella Michelin en su restaurante homónimo, ha diseñado para los atletas unas croquetas de champiñones con cardamomo negro y una versión de su famoso muesli de quinoa salado, el cual está elaborado con quinoa cultivada al sur de París, mascarpone, parmesano y cereales fritos crujientes por encima.
"Se trataba de crear una cocina que tuviera sentido para todos y que todos pudieran disfrutar, ya sea que los atletas coman comida kosher, halal o vegetariana, se trataba de que todos la disfrutaran. "Tienen que dejar la cuchara y decir: 'Guau, esto está muy, muy bueno'", contó el chef en una entrevista concedida a The Guardian, donde habló de la importancia que se le ha dado en estos Juegos a que un tercio de las 500 recetas que se preparen en las cocinas de la Villa Olímpica sean vegetarianas y estén hechas con verduras cultivadas localmente. La carne y el pescado que coman también serán de proximidad ya que las estrictas restricciones sobre la huella de carbono garantizan que ningún alimento para los Juegos Olímpicos de París llegará en avión.
También los millones de comidas y refrigerios que se venderán en los estadios en los que se disputen las competiciones serán de origen vegetal. Hot dogs vegetarianos, crepes vegetarianos orgánicos y sandwiches de escalope vegano serán algunas de las opciones. "El 60% de las recetas para el público general serán vegetarianas. Estamos convencidos de que estos Juegos son una oportunidad única para hacer las cosas de manera diferente y mostrar que otro modelo es posible", declaró al respecto el jefe de comida y bebida del comité de París 2024, Philipp Würz.
El restaurante más grande del planeta
El restaurante de la Villa Olímpica será durante lo que duren los Juegos el más grande del planeta ya que cuenta con una capacidad para albergar a más de 3.500 personas. Estará dirigido por el chef ejecutivo de la firma Sodexo Live! Charles Guilloy, quien se ha encargado de crear para esta cita un dal elaborado con lentejas verdes francesas cubierto con skyr, cilantro y una rodaja de pan de maíz así como una tarta tatin de tomates y cebollas que se sumarán al amplio y variado menú con alrededor de 40 platos diferentes.
El trabajo de Guilloy como director de cocina no consistirá en dar de comer a los deportistas antes de sus competiciones, también tendrá que hacerlo después de estas, cuando las necesidades nutricionales sean completamente distintas porque el cuerpo les pida algo más relajado. "En ese momento, una buena pizza tiene una sorprendente demanda", confesó el chef hace unas semanas.
Amandine Chaignot y Alexandre Mazzia, otros reconocidos cocineros franceses, también firman algunos de los bocados que se servirán en la Villa Olímpica. En concreto, serán el croissant con alcachofas y trufa de Chaignot y la merluza ahumada con tapioca en caldo de verduras de Mazzia.