Subidos al Mini del futuro: completamente eléctrico, apuesta por la seguridad con la tecnología más puntera del mercado

El Mini del futuro, pero sin perder su esencia. Estamos ante una nueva generación que sigue el estilo típico de los Mini pero, al mismo tiempo, simboliza el futuro totalmente eléctrico de la marca. Moderno, digital e inconfundible, esta transformación integral para convertirse en una marca totalmente eléctrica en 2030 se refleja en el diseño de estos nuevos modelos, que combinan la tecnología con los principios elementales del diseño de carrocerías y los orígenes de la marca. De este modo, se enfatiza el carácter urbano de Mini y su búsqueda de la innovación.

Algo que se percibe ya en su exterior, con una silueta que sigue las proporciones típicas de Mini: voladizos cortos, capó corto y larga distancia entre ejes, pero obviamente replanteadas para este coche de vocación urbana. Luego hay detalles como los tiradores enrasados de las puertas y la ausencia de guardabarros y de los clásicos faldones laterales que hablan de una propuesta moderna; de una reducción a lo esencial. De este modo, los rasgos de diseño típicos de Mini, como la división visual de la carrocería en tres partes, la superficie acristalada perimetral y el techo en contraste, tienen un mayor impacto.

Por su parte, el frontal del Mini Cooper apuesta de nuevo por los icónicos faros circulares, pero sin ser cromados, y por la llamativa parrilla. Esta, octogonal, luce un contorno afiligranado y se muestra más poderosa que su predecesora. En lugar de cromo, el nuevo color de acentuación Vibrant Silver realza el exterior. Lo mismo ocurre con los elementos de luz, en concreto en la iluminación diurna, que resulta muy impactante, y reafirman el carácter deportivo de este coche. Hay que hablar también de las propiedades aerodinámicas. El coeficiente cd de 0,28 es muy interesante para el segmento de los coches pequeños y hace que sea un coche extremadamente eficiente.

Tampoco hay que olvidar la parte trasera, nueva y muy actual, con superficies claras y pilotos traseros enrasados. Los grupos ópticos verticales remiten a las clásicas luces Mini y pueden conmutarse a diferentes modos del mismo modo que los faros delanteros.

Hay cuatro acabados para el Mini Cooper totalmente eléctrico. El acabado Essential que destaca ciertas partes funcionales como el logotipo en el nuevo color Vibrant Silver. Hay que referirse aquí a la nueva gama de acabados de pintura exterior, con tonos brillantes como el Sunny Side Yellow. El segundo acabado, el Classic, se aplica principalmente al interior, mientras que el Favoured es una variante con detalles en el exterior como el nuevo diseño opcional Spray-Tech del característico techo Multitone con una combinación de tres colores diferentes, así como una parrilla frontal en Vibrant Silver. Por último, no podía faltar el acabado John Cooper Works, que acentúa el carácter deportivo de este coche con un distintivo diseño frontal y trasero. El marco de la parrilla delantera y el logotipo en negro son de alto brillo mientras que el techo en contraste en Chili Red -inspirado en el automovilismo deportivo- y las franjas del capó específicas de JCW en rojo o negro dan el toque característico a la estética.

Para el primer modelo de 1959, el inventor de Mini Alec Issigonis diseñó un interior con un cuadro de instrumentos redondo en el centro y la característica barra de mandos debajo. En el nuevo Mini Cooper, son precisamente estos dos elementos, en combinación con el volante, los que estructuran el interior con su máximo diseño purista. Detrás del volante, el Head-up Display opcional garantiza que todo el contenido relevante aparezca en el campo de visión del conductor. El salpicadero, curvado y amplio, incorpora por primera vez superficies textiles, de diseño bicolor en el que se emplea poliéster reciclado. Se puede elegir entre diferentes colores para las superficies textiles y los asientos en función del diseño del tapizado. Además, para que el salpicadero sea lo más esbelto y espacioso posible, las salidas de aire son muy planas.

La pantalla OLED central es muy llamativa con su alta resolución. Como cuadro de instrumentos, la Unidad de Interacción Mini es un centro de experiencia y confort, en el que el Mini Operating System 9 –desarrollado en BMW Group y basado en una pila de software Android Open Source Project (AOSP)–, permite manejar todas las funciones del vehículo de forma intuitiva con control táctil o por voz. El diámetro de la fina pantalla táctil con borde de cristal de alta calidad ha aumentado hasta 240 mm. La presentación gráfica del contenido es moderna y se centra en lo esencial. La zona superior contiene información relacionada con el vehículo, como la velocidad y el estado de la batería. En el menú Inicio, los demás widgets se muestran en vista en miniatura a la izquierda y a la derecha de la función de menú actual. Se pueden abrir y seleccionar deslizando el dedo horizontalmente hacia el centro. En la zona inferior, las opciones de menú Navegación, Multimedia, Teléfono y Climatización pueden seleccionarse directamente en cualquier momento. Se puede acceder a todas las demás funciones a través del menú del mismo modo que en un smartphone. Está claro que la nueva generación Mini Cooper entra de lleno en la digitalización.

Otra novedad de este Mini Cooper totalmente eléctrico está en la llegada del primer asistente de voz de la marca. Puede activarse con el saludo «¡Hey MINI!» o utilizando el botón «push-to-talk» del volante, y comienza a interactuar en la pantalla OLED en forma de una animación de elementos gráficos, tipografía y un avatar. El conductor puede controlar con su voz la navegación, la telefonía, el entretenimiento y muchas otras funciones del vehículo. Por ejemplo, el vehículo puede aprender a abrir automáticamente la ventanilla al entrar en un aparcamiento. Esto hace que las rutinas diarias sean más cómodas y personales.

Los MINI Experience Modes –Core, Green y Go-Kart–, tienen cada uno su diseño específico de interfaz de usuario, están disponibles de serie y ofrecen una experiencia única y envolvente que se extiende hasta los paneles de las puertas. Esta experiencia de inmersión del usuario hace que el interior sea aún más expresivo. En el modo Personal, por ejemplo, se puede establecer una imagen seleccionada individualmente como fondo de pantalla a través de la MINI App. La iluminación ambiental bajo el salpicadero y en el retrovisor exterior también está codificada por colores. Cada modo cuenta con fondos especialmente diseñados que transmiten un efecto diferente y de alta calidad. En el modo Go-Kart, por ejemplo, el ADN de competición de de la firma se muestra de forma muy dinámica. La pantalla y el interior en su conjunto lucen los colores antracita y rojo, mientras que los indicadores analógicos complementan este modo inspirado en John Cooper Works. El Vivid Mode lo hace en los colores de la portada del álbum para la iluminación ambiental. También están disponibles el Core Mode, el Green Mode, el Timeless Mode, el Balance Mode y el Personal Mode para elegir según el estado de ánimo y las necesidades personales.

Este Mini Cooper incorpora nuevos sistemas de asistencia al conductor como el Asistente de Aparcamiento, que en su versión Plus opcional facilita aún más el proceso de aparcamiento gracias a 12 sensores ultrasónicos y cuatro cámaras de visión periférica y llega incluso a iniciar de forma autónoma maniobras de aparcamiento. Y otro detalle más de la capacidad de innovación está en la Mini Digital Key Plus, que utiliza el smartphone para la apertura automática del vehículo.

El nuevo MINI Cooper está disponible en dos variantes: Cooper E y Cooper SE. El motor eléctrico de 135 kW/184 CV del MINI Cooper E genera un par motor de 290 Nm, acelerando el vehículo desde parado hasta 100 km/h en 7,3 segundos. Con una potencia de 160 kW/218 CV, el MINI Cooper SE acelera de 0 a 100 km/h en 6,7 segundos con un par máximo de 330 Nm. La autonomía es de hasta 305 kilómetros para el MINI Cooper E sobre la base de la batería de alto voltaje con 40,7 kWh de capacidad. En el MINI Cooper SE, la autonomía aumenta hasta un máximo de 402 kilómetros gracias a una batería de 54,2 kWh de capacidad.

La batería del MINI Cooper puede cargarse mediante corriente alterna con 11 kW. La carga rápida con corriente continua es posible en el MINI Cooper E con 75 kW y en el Cooper SE con hasta 95 kW. En una estación de carga rápida, esto permite cargar la batería del 10% al 80% en poco menos de 30 minutos. Dependiendo de las condiciones meteorológicas, la navegación activa a través de Mini Navigation se encarga de que la batería de alto voltaje alcance con antelación la temperatura ideal para una carga eficiente. Además, se puede seleccionar la hora de inicio de la carga o establecer una ventana de tiempo específica para la carga. También se puede determinar de antemano un determinado nivel objetivo para la capacidad de la batería

En definitiva, estamos ante un coche que tiene una presencia visual más poderosa –a lo que también contribuyen los neumáticos, que han aumentado a 635 mm su diámetro–, y que ofrece un comportamiento dinámico de conducción y un confort mejorados. De vocación urbana, esta nueva generación totalmente eléctrica es el preludio de dónde está el destino de la marca, pero da las claves de esa interactuación del conductor con los últimos avances tecnológicos. Con la digitalización.