El Pueblo Europeo de la Navidad de 2025 está al norte de España
La Red de Ciudades Navideñas ha reconocido por sus tradiciones, su compromiso con el espíritu comunitario y sus experiencias festivas esta coqueta localidad cántabra.
"Encanta a los visitantes con su encanto costero y sus emotivas celebraciones comunitarias. Su transformación en un pueblo navideño crea un paraíso festivo donde las tradiciones y los sabores locales brillan". Este es el argumento que han dado desde la denominada Red de Ciudades Navideñas para nombrar a Noja como Pueblo Europeo de la Navidad para el 2025.
Esta localidad del norte de España ha sido la elegida por esta organización que se dedica a promover los valores culturales, sociales y económicos de las celebraciones navideñas en toda Europa. Se trata de una iniciativa, que cuenta con el apoyo del Parlamento Europeo, cuyo objetivo es destacar ciudades y pueblos que ejemplifiquen el compromiso comunitario, la innovación y la preservación del patrimonio durante la temporada navideña.
Desde European Capital of Chistmas recomiendan de Noja "los tranquilos paseos por la naturaleza de las Marismas de Santoña y las calles iluminadas del pueblo que capturan el espíritu navideño junto al mar" y destacan especialmente tanto los mercados de artesanía local como las delicias gastronómicas de la zona –entre las que reinan los sobaos y las quesadas– así como los talleres y actividades planificadas para toda la familia en la llamada 'Casa de Navidad'.
Vilnius y Celje, capital y ciudad Europea de la Navidad 2025
El jurado internacional, presidido por la profesora Danuta Hübner, quien ha sido comisaria europea de Política Regional, ministra de Asuntos Exteriores de Polonia y miembro del Parlamento Europeo; ha elegido a Noja como Pueblo Europeo de la Navidad para el 2025 en la misma convocatoria en la que han sido premiadas otros dos lugares más: Vilnius y Celje.
La primera ha sido nombrada Capital Europea de la Navidad de cara al año que estamos a punto de entrar para así recoger el testigo de Brno, en República Checa que es la que hasta ahora ostentaba dicho título.
La capital de Lituania propone una experiencia navideña impregnada de historia y creatividad moderna en la que el casco antiguo de la ciudad, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, se convierte en un paraíso invernal, con calles adoquinadas iluminadas por cálidas luces festivas. Destaca especialmente el emblemático árbol de Navidad de la plaza de la Catedral, los animados mercados, las pistas sobre hielo, las decoraciones sostenibles y los eventos culturales que se planifican para estas fechas.
Celje, por su parte, se transforma en un destino de cuento de hadas cada diciembre con su evento estrella, Fairytale Celje. Este es conocido porque en él se puede disfrutar de espectáculos, cuentacuentos, exhibiciones artísticas y decoraciones temáticas; además del mercado Treasure Trove of Gifts con productos artesanales y música en vivo.
"No te pierdas las actividades navideñas medievales en el castillo de Celje y las instalaciones de iluminación únicas de la ciudad, que combinan historia con encanto festivo", apuntan desde la organización de estos reconocimientos que dictaminan cuáles son los lugares de visita obligada durante la temporada navideña.