Praga, una visita de lujo

Paseo y compras en los mercadillos navideños de la Plaza Vieja donde después de contemplar el baile de las horas del reloj astronómico de Praga, podrás disfrutar del ambiente navideño y comprar marionetas artesanales, matrioskas y preciosas piezas de cristal de Bohemia. Si eres goloso, en Navidad se llena de “puestecitos” donde probar el típico pastel dulce eslovaco, el Trdelník, masa de harina enrollada y hecho al fuego con canela y azúcar. Visita al Castillo de Praga que aloja la Catedral de San Vito y la Calle del oro con las casitas de colores que habitaron los artesanos y orfebres del siglo XVII. En la casa número 22 vivió Franz Kafka. Contemplar la Casa Danzante, uno de los más importantes edificios contemporáneos, del arquitecto Frank Gehry, que para diseñarlo se inspiró el Fred Astair y Ginger Rogers en pleno baile. Todo un contraste en la panorámica de la ciudad. Visita obligada es el enclave romántico y con más encanto de la ciudad: la isla de Kampa, declarada como la segunda isla urbana más bella del mundo…con sus callecitas estrechas, canales,... y el puente lleno de candados y promesas de amor. Un paseo tranquilo y agradable por la calle Parizska, la zona más privilegiada de Praga, que divide en dos El Barrio judío, donde deleitarse con las maravillosas vistas de los edificios históricos perfectamente conservados y sucumbir al encanto de las tiendas de grandes firmas de lujo repartidas a lo largo de toda la calle. En este agradable paseo, los edificios son majestuosos, si alzas la vista hacia arriba tendrás la visión espectacular de los edificios y a pie de calle tienes los bajos con todas las firmas de lujo. Una mezcla cautivadora. Si quieres comprar un regalo especial, una muy buena opción la tienes en las tiendas de antigüedades o las licorerías y tiendas de habanos repartidas en la Ciudad Vieja. Fantásticas las Old Clocks- Historické Hodini, House of Churchill y Tretter's.

Dónde alojarse

Four Seasons Praga. El mejor hotel de Praga. Con inmejorable situación en medio de la Cuidad Vieja con vistas al río y al puente de Carlos. El hotel tiene lo mejor del histórico y lo moderno con un complejo e varios edificios modernos e históricos maravillosamente integrados. Las habitaciones están decoradas al detalle con candelabros de Bohemia. Un patio con piscina y terraza maravillosa donde tomarse una copa disfrutando de las vistas de la ciudad. Su restaurante italiano Cotto Crudo es un must de la ciudad y bien valdría una estrella Michelín Hotel Augustine, a Luxury Collection hotel Prague. Un hotel de lujo con historia. Situado al otro lado del puente de Carlos muy cerca del Castillo de la cuidad de Praga. Antiguo Monasterio Agustino del Siglo XIII, y remodelado con mucho gusto y decorado con el estilo del cubismo checo. En una parte del monasterio todavía viven monjes alojados. Tranquilo y romántico y a la vez cerca del bullicioso centro. Despertar con música de órgano al amanecer y contemplar las vistas del Castillo. Fabrican su propia cerveza con la receta original de los monjes que se puede probar en el maravilloso bar del hotel.

Los mejores restaurantes

La guía por los restaurantes de visita obligada para sibaritas son los estrellas Michelín de Praga. La Degustation y Field. Alcron Un consagrado estrella Michelín de la ciudad, con un maravilloso menú degustación de 7 platos en un ambiente ciertamente retro con mucho encanto. Como postre, elige la maravillosa degustación de quesos. La Degustation Boheme Bourgeoise. En un local moderno con toques que bien podrían trasladar al “Meatpacking District de NY” y cocina vista integrada en la sala donde puedes ver el excelente trabajo de los cocineros. Menú degustación de cocina tradicional checa llevada a la modernidad con sumo gusto y originalidad. Field. La nueva incorporación a las estrellas Michelín en Praga en 2016 Cocina de autor innovadora con producto tradicional checo. Otra visita obligada con toques más modernos y frescos. ZDenek's Oyster Bar. Local de mariscos y pescados franceses en El Centro de Praga. Un sitio ideal para una cena a base de maravillosas ostras y mariscos y un buen vino o Champagne. Sasazu. Sitio de moda en la ciudad, en un almacén reformado a las afueras de Praga Asiático japonés, tai fusión. Moderno, fashion, mucho ambiente, gente guapa y música alta. Para una cena divertida y muchos cocktails. Dos restaurantes italianos destacados de la ciudad son Divinis y Cotto Crudo Divinis. Y si te atreves a salirte del circuito más tradicional del centro, todo un descubrimiento será el Maso a Kobliha. Con decoración sencilla, es un lugar ideal para tomar el Brunch y probar algunas tapas típicas checas con un estilo moderno. No dejes de probar los Damn Scotch Eggs, huevos escoceses, y el Kobliha o donut/berlinesa típico de Praga que en este sitio lo bordan relleno de vainilla. Del mismo chef que Maso a Kobliha y justo al lado está Sansho, asiático sin pretensiones con toques checos, muy recomendable y otro de los must de la ciudad. Si lo que se desea es una buena hamburguesa, las mejores las sirven en Dish Fine Burger Bistro. Para un café a media tarde con una deliciosa tarta, la cafetería Art Decó Kavarna Obecni Dum o el Café Savoy son dos opciones infalibles, así como probar los mejores trdelníks de la ciudad en la Creperie U Kajétana.