Las Margaritas, el encanto de un restaurante que reinventa la ‘cocina de toda la vida’

Cada primavera, justo antes de la llegada del verano, las terrazas se convierten en el rincón preferido de aquellos que buscan desconexión y gastronomía en un mismo espacio. Entre las decenas de opciones presentes en la capital cada temporada, el restaurante Las Margaritas condensa la sencillez de la gastronomía de siempre con un excelente servicio. Está ubicado en El Planti?o, a las afueras de Madrid, y ahora abre sus tres terrazas, dos de ellas ajardinadas y abiertas al exterior -una situada en la entrada del local, de cara?cter informal, y otra en la parte trasera- y una tercera acristalada, denominada la ‘terraza de entretiempos’.

Mesa en el jardín de la terraza trasera.

Se trata de un espacio de ma?s de 800 metros cuadrados que ofrece platos para compartir y recetas de la gastronomi?a espan?ola de toda la vida. Entre sus ingredientes estrella se encuentran los huevos frescos de Finca Cabezamarta, presentes en platos como la ensaladilla rota sobre regan?a? y las verduras y hortalizas en platos como las piparras fritas, la lasan?a de verduras o la ensalada de pimiento asado.

Las Margaritas abandera una cocina honesta y sin florituras, creada a partir de recetas tradicionales que cambian cada temporada. La joya de esta casa es su parrilla, ubicada en la terraza trasera, y que apuesta principalmente por los pescados -procedentes muchos de ellos de diferentes lonjas del Canta?brico-, disponibles enteros o en formato de brocheta. Algunas opciones son el rodaballo, el mero, la lubina salvaje y el bacalao.

A la izquierda, ensaladilla rota sobre regañá. A su lado, tataki de vaca sobre verduras asadas.

Crecer a la vanguardia

Al frente del proyecto se encuentra Bosco Blanco, que parte de la sencillez para diseñar el restaurante utilizando como referencia la simplicidad y belleza de la margarita. Su filosofía culinaria defiende la cocina de siempre, bien hecha y sin adornos. Liderando los fogones esta? el chef Javier Montes, formado en la escuela de cocina de Luis Irizar, en el Pai?s Vasco. El minimalismo y los colores neutros estructuran el interior del local, que transmite una sensación de confort y espíritu hogareño.

Entre los planes próximos del establecimiento se encuentra la incorporacio?n de un plato del di?a, el desarrollo de una carta de aperitivos para tomar en las terrazas en un ambiente informal y relajado y un brunch para disfrutar el fin de semana.