El Chronométrie Ferdinand Berthoud FB1 gana su «Oscar» en Ginebra

El Chronométrie Ferdinand Berthoud FB1 ha causado sensación en el mercado y prueba de ello es el reconocimiento de este trabajo con la L’Aiguille D’or 2016, el máximo galardón del Grand Prix D’Horlogerie de Geneve (GPHG). Este trabajo, inspirado en los extraordinarios cronómetros marinos concebidos por el fundador de esta casa, ofrece como resultado el efecto de llevar un cronómetro de marina atado a la muñeca. Algo que se amplifica gracias a la colocación de una especie de pernos a los que se ata la correa y que recuerdan a las fijaciones de su inspiración en las cajas de madera que los contenían. Karl-Friedrich Scheufele, presidente de la Chronométrie Ferdinad Berthoud, ha querido que este reloj excepcional se cree en el más profundo respeto de los preceptos del maestro, dando continuidad a su obra cuatro siglos después. Dentro de una caja octogonal con ojos de buey estancos, el Chronomètre Ferdinand Berthoud FB 1 está equipado con un movimiento mecánico de carga manual inédito, accionado por más de 1.120 piezas. Completamente desarrollado, concebido y fabricado por la firma en Fleurier, el calibre FB-T.FC aglutina un tourbillon con segundero central, una arquitectura característica en pilares (la misma utilizada por el maestro en el siglo XVIII), un innovador dispositivo de regulación, de fuerza constante, con forma de huso-cadena suspendido y un cono móvil de reserva de marcha, objeto cada uno de ellos de una solicitud de patente. Fruto de casi tres años de investigación y desarrollo coronados por las pruebas de fiabilidad más avanzadas, el calibre FB-T.FC ofrece una precisión y una regularidad de la marcha excepcionales, certificados por el COSC, una autonomía de 53 horas y un óptimo nivel de legibilidad.