Lo mejor de dos mundos: Glenfiddich Grand Cru, el whisky escocés con alma francesa

Glenfiddich Grand Cru se ha ganado a pulso ser protagonista dentro del universo de los whiskies premium; su carácter complejo y sofisticado es resultado de la unión del saber hacer y la búsqueda constante de innovación presente en la destilería escocesa desde su nacimiento hace 135 años. Para estas Navidades, propone realizar un viaje a través del paladar, del tiempo y del espacio, pues esta exclusiva referencia ha envejecido durante 23 años en barricas de roble blanco americano, y, posteriormente, de roble europeo, para finalizar su proceso de añejamiento en barricas de cuveé francés. Dos regiones, Escocia y Francia, fusionan en una botella lo mejor de sus tierras para elevar la experiencia del whisky y convertirla estas Navidades en auténtico sinónimo de celebración.

[caption id='attachment_6459' align='alignnone' width='1024'] Glenfiddich Grand Cru, el whisky imprescindible para celebrar estas fiestas.[/caption]

La tradición artesana se reinventa

Porque las ocasiones especiales merecen una bebida que capture la esencia del disfrute lento, Grand Cru de Glenfiddich es la opción perfecta para el consumidor exigente. Su complejo proceso de elaboración proporciona a este whisky un final suntuoso y complejo, pues las barricas son las mismas que se utilizan en la fabricación del champagne. Brian Kinsman, Maestro de Malta de Glenfiddich, concibió esta idea de combinar maltas de calidad excepcional con el espumoso francés, de forma que el resultado sea un whisky lleno de matices, alejado de las demás variedades de la marca gracias a la presencia de notas florales y especias cítricas.

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Matices diferenciadores

Glenfiddich Grand Cru ofrece un sabor intenso presente en varias capas, acompañado de notas de esencia de vainilla, roble, brioche dulce, sándalo con un agregado sutil de uva blanca y pera. A la vista, se aprecia un elegante color dorado y en nariz, se perciben sutiles notas de flor de manzano, pan horneado recién horneado y limón confitado. En boca, se disfrutan guiños a roble y vainilla, combinadas con toques de brioche dulce, sándalo, sorbete de pera y uvas blancas. Su acabado es largo y persistente.

Glenfiddich reafirma con Grand Cru, el whisky escocés de una sola malta más galardonado del mundo, que no cesa en su búsqueda de la innovación, la misma que ha llevado a la marca a convertirse en artífice de una colección de exquisitos y audaces whiskies. Glenfiddich Grand Cru se presenta en una elegante botella de cristal negro con detalles dorados y está disponible en El Club Gourmet El Corte Inglés a un precio de 290 euros.

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